El ex presidente Hipólito Mejía deploró el abandono en el que a su juicio está el sector agropecuario dominicano por parte del Gobierno.
Explicó que la mejor demostración del fracaso en la política agropecuaria de la actual gestión está en los altos precios de los principales rubros del campo, como el plátano, la yuca, pollo, además en el deterioro del medio ambiente y los recursos naturales.
Agrega que el presidente Danilo Medina no hace nada con acudir a un campo, en las llamadas “visitas sorpresa” y prometer de todo para luego no cumplir nada. Lo acusa de utilizar ese método como campaña mediática.
Sustentó el informe del equipo agropecuario del Partido Revolucionario Moderno (PRM), que encabeza Leonardo Faña, en el cual se demostró que alrededor del 90% de las promesas del presidente a los agricultores en las visitas sorpresa, no se cumplen.
Hipólito Mejía criticó la forma en cómo se ofrece el crédito a los hombres del campo, mediante la Banca Solidaria, cuando para eso existen los bancos Agrícola y de Reservas.
Mejía considera que el presidente Medina debe dejar que cada institución juegue su papel, los créditos por los bancos Agrícola y Reservas, el agua por el Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos (Indrhi) y así sucesivamente.
Mejía advirtió además sobre el peligro que alegadamente acecha al sistema democrático y dijo estar en disposición de encabezar un movimiento para defender la democracia dominicana.
Indicó que en las próximas elecciones habrá que respetar la decisión de la voluntad popular, aunque el poder y el dinero estén de un solo lado, como ocurrió en el pasado proceso electoral, donde asegura, se robaron el dinero del pueblo y provocaron un déficit fiscal de manera abusiva e irresponsable.
Dijo que no se quedará como un simple espectador sentado en una mecedora a la espera que el maná le caiga del cielo.
Dijo que está decidido a enfrentar la problemática nacional dentro de un marco de decencia y respeto a la dignidad humana y a la democracia dominicana.
Criticó que Medina asuma el mismo procedimiento de su antecesor Leonel Fernández, de rehuir al debate y asumir la irresponsabilidad de grandes proyectos fuera del Presupuesto con lo que viola todos los procedimientos institucionales.
El ex mandatario considera que ya es tiempo de sentarse a tratar los temas nacionales, pero con respeto al criterio y a la dignidad de los opositores en un momento determinado.
