Siria- Más de 40 civiles, incluyendo numerosos niños, murieron en ataques de la coalición dirigida por Estados Unidos en la ciudad siria de Raqa, donde los combates contra los yihadistas causan estragos en las zonas más pobladas, según una organización.
La coalición formada por decenas de países aporta un apoyo aéreo crucial a las Fuerzas Democráticas Sirias (FDS), una alianza kurdoárabe implicada en una ofensiva para expulsar al grupo yihadista Estado Islámico (EI) de Raqa, su principal bastión en Siria, en el norte del país.
Tras haberse apoderado del 60% de la ciudad, las FDS rodean al grupo EI en una zona de 10 km2 en el centro y el norte de la localidad, donde la mayoría de la población se ha visto atrapada por los intensos bombardeos aéreos y por los disparos de artillería.
El lunes, al menos 42 civiles, de los que 19 eran niños y 12 mujeres, perdieron la vida en los bombardeos efectuados contra varios barrios del norte de Raqa, según el Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH).
Y el domingo, 27 civiles murieron allí. En ocho días, cerca de 170 civiles han muerto por culpa de los bombardeos, según la organización. Los aviones de la coalición llevaron a cabo la semana pasada 250 bombardeos contra objetivos yihadistas en Raqa, indicó este martes a la AFP un portavoz militar estadounidense.
"Los balances son altos, pues los bombardeos apuntan contra barrios del centro de la ciudad, muy densamente poblados", afirmó a la AFP Rami Abdel Rahman, director del OSDH.
"Hay edificios llenos de civiles que intentan huir de las líneas del frente. Los bombardeos de la coalición apuntan a cualquier edificio en el que se detectan movimientos de Dáesh", agregó, utilizando el acrónimo árabe del grupo EI.
La coalición internacional no reaccionó a los últimos balances del OSDH, pero anteriormente había asegurado que estaba tomando medidas para evitar víctimas civiles.
Desde 2014, la coalición ha reconocido ser responsable de la muerte de 624 civiles en bombardeos, según un balance publicado a principios de agosto. Algunas organizaciones consideran, sin embargo, que este número está altamente subestimado.
"El peor lugar de Siria hoy en día es la parte de Raqa que sigue en manos del (grupo) Estado Islámico", dijo la semana pasada Jan England, jefe del grupo de trabajo humanitario de la ONU para Siria.
La ONU calcula que habría unos 25.000 civiles atrapados en Raqa.
Preguntado al respecto, el portavoz de las FDS, Talal Sello, afirmó a la AFP que sus fuerzas intentaban no causar víctimas civiles.
"Una de las principales razones que explican la lentitud de nuestro avance es nuestra voluntad de preservar la vida de los civiles", señaló.
"Hemos abierto rutas seguras para los civiles, para que puedan llegar a zonas controladas por nuestras fuerzas, que salvan casi a diario a civiles transfiriéndolos a lugares seguros", según él.
En cambio, el portavoz de las FDS acusó al grupo EI de "utilizar a los civiles como escudos humanos, disparar contra ellos e impedirles huir".
Las FDS lanzaron hace ocho meses la ofensiva para conquistar Raqa, tristemente conocida por las ejecuciones que los yihadistas perpetraron allí desde que se hicieran con el control de la ciudad, en 2014.
La alianza kurdoárabe ha hecho frente a una feroz resistencia desde que en junio entraran en la ciudad, donde los combates forzaron a miles de civiles a abandonar sus hogares para desplazarse a campamentos improvisados donde viven en condiciones muy precarias.
El conflicto sirio, que comenzó hace más de seis años a raíz de la violenta represión de unas manifestaciones prodemocracia por parte del régimen de Bashar Al Asad, ha ido ganando complejidad con la implicación de actores regionales e internacionales y de grupos yihadistas, en un territorio dividido.
Ha dejado más de 330.000 muertos y millones de desplazados.