Bogotá (AFP)- El papa Francisco encontrará este jueves a una multitud de fieles para hablar de paz y defensa de la vida desde una Colombia que intenta enterrar el último conflicto armado de América.
El jefe del Vaticano se reunirá con el presidente Juan Manuel Santos y oficiará la primera de cuatro de misas al aire libre en el marco de la visita que concluirá el domingo.
Su primer viaje a Colombia está marcado por su mensaje de reconciliación tras la paz con las FARC, principal guerrilla del continente y ahora convertida en movimiento político, un proceso que apoyó sin titubeos.
"No se dejen vencer, no se dejen engañar, no pierdan la alegría, no pierdan esperanza", dijo Francisco el miércoles a las personas que se congregaron en la nunciatura de Bogotá.
Con ocho millones de habitantes, Bogotá saldrá al encuentro del papa de 80 años.
Unas 600.000 personas son esperadas en el parque Simón Bolívar, oeste de la capital, para oír al Francisco de las periferias y del medio ambiente que pregona por el mundo su preferencia por los más pobres.
"La paz es la que Colombia busca desde hace mucho tiempo y trabaja para conseguirla. Una paz estable y duradera, para vernos y tratarnos como hermanos, nunca como enemigos", dijo el pontífice en un videomensaje divulgado el lunes.
Nubia Díaz, que perdió a su esposo e hija a manos de paramilitares de ultraderecha en el norte del país, está esperanzada en que el mensaje de Francisco cale en los colombianos.
"Ojalá que haya un cambio con la venida del santo papa, que la gente se concientice y cambie para que en este país no haya tanta violencia, tantos asesinatos", dijo a la AFP esta mujer de 69 años.
Francisco sostendrá un encuentro de Estado por la mañana con Santos en la Casa de Nariño, sede del gobierno.
El papa "viene a empujarnos a dar el primer paso con lo que él mismo ha llamado el paso de la reconciliación y, después de tantos años de guerra, de tanto conflicto, eso es lo que necesitamos", afirmó el mandatario.
El gobierno de Santos firmó en noviembre un pacto para superar medio siglo de conflicto armado con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y negocia uno similar con el Ejército de Liberación Nacional (ELN), última guerrilla activa en el país.
Además de guerrillas izquierdistas, la conflagración interna colombiana ha enfrentado a agentes estatales, narcotraficantes y paramilitares, dejando más de siete millones de víctimas entre muertos, desplazados y desaparecidos.
"Él no viene aquí a llamarle la atención a nadie. El mensaje es decirles que la única manera con la que Colombia puede salir adelante es a través de la reconciliación, no solo con las FARC y el ELN, sino de toda la sociedad", explicó a la AFP Néstor Ponguta, corresponsal de W Radio en el Vaticano.
Tras la reunión con Santos, el papa recibirá las llaves de la ciudad y visitará la Catedral Primada de Colombia, ubicada en la Plaza de Bolívar y donde lo esperarán alrededor de 3.000 fieles.
En la parroquia, orará en silencio la "Letanía de la Virgen" y pondrá un rosario sobre el cuadro de la Virgen de Chiquinquirá, la patrona de Colombia y de regiones de Venezuela y Perú.
Desde el balcón de la catedral, sede del arzobispo de Bogotá, saludará y dirigirá algunas palabras a los jóvenes convocados a la plaza, corazón político de Colombia.
En un salón de la iglesia, se reunirá con 130 obispos colombianos y después de almorzar se encontrará con el comité directivo del Consejo Episcopal Latinoamericano.
El Vaticano confirmó que tendrá un encuentro privado con obispos y cardenales de Venezuela, sumida en una crisis económica y política.
El pontífice abogó el miércoles por un diálogo entre el gobierno de Nicolás Maduro y la oposición.
"Parte importante de cómo podemos salir de la crisis en Venezuela es cómo reencontrarnos como venezolanos y con nuestra fe", dijo María Elisa Ramírez, una venezolana de 50 años que abandonó su país por la escasez de alimentos y la inseguridad.
Como ella, se espera la asistencia a la homilía de centenares de venezolanos residentes en Bogotá.
Además de Bogotá, Francisco visitará las ciudades de Villavicencio, Medellín y Cartagena.
Se prevé una asistencia total de 4,7 millones de personas a sus recorridos y misas.