Al menos 47 personas perdieron la vida en los estados de Morelos y de México por el terremoto de magnitud 7 en la escala de Richter que sacudió este martes con violencia el centro del país.
Mientras tanto, en la Ciudad de México hay un total de 27 edificios destruidos y se teme que haya personas atrapadas.
Los equipos de rescate y los vecinos trabajan para rescatar a muchas personas que se temen se encuentran bajo los escombros.
En Morelos, epicentro del sismo, se registraron 42 víctimas fatales, mientras que en el Estado de México murieron dos adultos y tres niños.
En el estado de Morelos, el mayor número de fallecidos se registró en la localidad de Jojutla (12), informó el gobernador Graco Ramírez a través de la red social Twitter.
En Cuernavaca, capital de Morelos, hay cuatro personas sin vida, en Tetecala murieron 6 personas, seis en Yecapixtla, cuatro en Jiutepec.
Otros cuatro en Axochiapan, y también en Miacatlan y Tlayacapan.
Además, hay un fallecido en Cuautla y otro en Yautepec.
En tanto, el gobernador del Estado de México, Alfredo del Mazo, informó a Milenio Televisión de cinco víctimas mortales y confirmó 22 heridos.
Del Mazo reportó daños en infraestructuras, mientras que están operando todas las carreteras del estado.
En la Ciudad de México se siguen registrando escenas de confusión ante el temor de réplicas y con un caos automovilístico en las calles que genera aun mayor caos.
Por otro lado, el aeropuerto de Toluca recibe vuelos que no pueden aterrizar en el aeropuerto capitalino, una de cuyas terminales fue cerrada tras el terremoto.
El sismo registrado en el centro de México fue de 7 en la escala de Richter, según la última actualización del El Servicio Sismológico Nacional (SSN), que inicialmente situó el movimiento en 6,8 y después en 7,1.
El epicentro del movimiento se localizó en el límite entre los estados Puebla y Morelos, a 12 kilómetros al sureste de Axochiapan, Morelos, y a 120 kilómetros de la Ciudad de México, y la profundidad fue de 57 kilómetros, precisó el SSN en un comunicado.
El sismo también causó numerosos cortes en el servicio eléctrico, fugas de gas e interrumpió el servicio de telefonía, así como el del Metro, pero aún no se reportan víctimas mortales.
Tras percibir el movimiento, ciudadanos que habitan y trabajan en edificios altos captaron los derrumbes de varios inmuebles en las colonias Condesa y Roma, afectadas en el sismo de 8,1 en la escala de Ricther que ocurrió justo hace 32 años y dejó miles de muertos.
En el sur de la ciudad, en Coyoacán, la Iglesia de San Juan Bautista sufrió daños en una de sus torres y en Xochimilco se cayó la parroquia de San Bernardino.
Las actividades escolares fueron suspendidas hasta nuevo aviso, al igual que la sesión bursátil de la Ciudad de México, para salvaguardar la seguridad del personal y de las instalaciones.
La ciudadanía de inmediato se dio a la tarea de asistir y brindar ayuda en los derrumbes y colapsos.
El temblor generó numerosas escenas de pánico en la capital del país y ocurrió dos horas después de que la ciudadanía saliera a las calles de todo el país en un simulacro conmemorativo del terremoto de 1985 de magnitud 7,1.
Esta vez el sismo se sintió con más fuerza que el registrado apenas el 7 de septiembre, de magnitud de 8,2 en la escala de Richter, dado que el epicentro fue más cercano.
El sismo del 7 de septiembre, el más poderoso desde 1932 en el país, dejó 98 muertos en el sur del país; 78 en Oaxaca, 16 en Chiapas y 4 en Tabasco.