Las autoridades de Cataluña revelaron que unas 337 personas resultaron heridas este domingo en altercados entre ciudadanos y fuerzas del orden ante centros de votación del referéndum ilegal sobre la independencia de la región española.
Informaron que de ese total nueve policías y dos guardias civiles también resultaron heridos de carácter leve al intervenir para retirar urnas e impedir la celebración del referéndum como ha ordenado la Justicia, lo que ha generado momentos de tensión.
Las cargas policiales y otros incidentes provocaron hoy heridos y contusionados de diversa consideración (alguno grave), uno de ellos por un pelotazo de goma en un ojo.
El Ministerio español del Interior apeló a la tranquilidad en las calles y pidió colaboración y respeto en los colegios electorales para que las fuerzas de seguridad puedan cumplir con la orden judicial de impedir de forma pacífica la celebración de la consulta, suspendida por Tribunal Constitucional.
El portavoz del Gobierno catalán, Jordi Turull, atribuyó los heridos y contusionados a la “violencia policial del Estado” y les aconsejó que acudan a centros de salud para obtener un certificado médico y presenten una denuncia ante la policía autonómica (Mossos d’Esquadra).
Turull responsabilizó al presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy, de los “gravísimos hechos”, entre los que también señaló la “agresión” a la responsable regional de Enseñanza, Clara Pontsatí.
Por su parte, el ministro español de Interior, Juan Ignacio Zoido, explicó que los agentes se han encontrado situaciones “complicadas”.
Pero tan solo en uno de ellos, en el centro de votación Ramón Llul de Barcelona, tuvo que utilizarse métodos de defensa al verse en una situación de “acorralamiento”, aseguró.