Caracas- La oposición venezolana volvió a denunciar hoy que hubo fraude en las elecciones de gobernadores celebradas el domingo, ante lo que pidió a la comunidad internacional ejercer mayor presión contra el Gobierno de Nicolás Maduro.
"El régimen asumió el camino del fraude, la violencia, irregularidad, manipulación, ventajismo, corrupción, trampa, extorsión, coacción y chantaje para torcer y desconocer la voluntad de nuestro pueblo", señala un comunicado de la alianza opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD).
El portavoz de ese bloque, Ángel Oropeza, dijo en rueda de prensa que han detectado "un gran número de irregularidades" ocurridas durante las votaciones en todo el país.
Entre ellas, aseguró, a un millón de electores se les "impidió u obstaculizó votar en centros históricamente opositores", mientras que otros 350.000 sufrieron "violencia e intimidación dentro y fuera de los centros".
Señaló también que hubo 90.537 votos nulos "que debieron haber sido para los candidatos de la oposición", y achacó esto a la negativa del CNE de sustituir las boletas electorales por lo que los aspirantes opositores vieron limitadas sus tarjetas.
Por ello, la MUD solicitó "el respaldo de los pueblos, parlamentos y gobiernos del mundo, así como la mayor condena, presión y sanciones contra el régimen de Nicolás Maduro", y anunció que enviará una delegación al extranjero a explicar lo sucedido y sus exigencias.
Asimismo, el antichavismo remarcó que no asistirá "a ningún proceso de exploración, conversación o negociación" con el oficialismo -suspendido en septiembre por el supuesto incumplimiento de los acuerdos- "hasta tanto no se hayan aceptado las auditorías" al proceso electoral del domingo.
El gobernante Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) ganó las elecciones en 17 de los 23 estados del país, según el balance oficial ofrecido anoche por el Consejo Nacional Electoral, mientras que la MUD, que consiguió cinco triunfos, no reconoce los resultados.
Hasta ahora, solo dos candidatos opositores, vencidos ayer por el chavismo, han anunciado su intención de impugnar los resultados en sus respectivos estados al denunciar supuestas irregularidades.
El candidato de la MUD al estado Vargas (litoral), José Manuel Olivares, denunció que las "incidencias" registradas en esa entidad federal cercana a Caracas "indican que 60.000 electores fueron afectados o imposibilitados para ejercer su derecho al voto".
Mientras tanto, la candidata de la MUD en el estado Delta Amacuro (noreste), Larissa González, dijo que los resultados anunciados por el CNE en esa localidad "no son la realidad de este estado" sino "una trampa" del Gobierno.
Por otra parte, el jefe del comando electoral del PSUV, Jorge Rodríguez, consideró que el resultado de las elecciones de este domingo es una llamada del pueblo al diálogo.
Destacó que los resultados de estos comicios significan una "recomposición del voto chavista" que, explicó, ha tenido altibajos a lo largo de los 18 años de chavismo gobernante.
Entretanto, el primer vicepresidente del PSUV, Diosdado Cabello, criticó que la oposición "cante fraude" sin tener pruebas de esta acusación.
Con todo, la presidenta de la Asamblea Nacional Constituyente (ANC), Delcy Rodríguez, anunció que este suprapoder instaurado por el oficialismo juramentará este martes a los gobernadores regionales declarados vencedores.
Rodríguez compareció ante la prensa acompañada de la presidenta del CNE, Tibisay Lucena, que emplazó a quienes no acepten los resultados ofrecidos hasta ahora a utilizar los canales legales existentes para impugnarlos.
Asimismo, los acompañantes internacionales que siguieron los comicios validaron hoy los resultados oficiales.
"La misión considera que el proceso se realizó de manera exitosa y que la voluntad de los ciudadanos expresada pacíficamente en las urnas se ha respetado", afirmó desde las instalaciones del CNE en Caracas uno de estos portavoces, el presidente del Consejo de Expertos Electorales de Latinoamérica, Nicanor Moscoso.
A esta hora sigue pendiente el recuento de votos en el estado Bolívar del sur del país, donde una cantidad de votos muy pequeña separaría a los candidatos de ambos bandos. EFE