Malta- El asesinato de la periodista maltesa Daphne Caruana Galizia, cuyo hijo ha culpado al Gobierno de Joseph Muscat de permitir el crimen y la corrupción, ha conmocionado a Malta, donde diversas asociaciones se han manifestado hoy para protestar contra el crimen.
Cientos de ciudadanos han salido a las calles de Malta para condenar el asesinato de Caruana Galizia, fallecida este lunes después de que su coche saltara por los aires en una fuerte explosión que sucedió a pocos metros de su casa.
Las protestas de hoy se han sucedido a la concentración con velas celebrada anoche en homenaje a la periodista y a la que asistieron algunas autoridades del país.
El clima de tensión se ha extendido con rapidez por la pequeña isla mediterránea, donde algunos muros han aparecido este martes con pintadas críticas contra la impunidad, la corrupción y la delincuencia en el país, tal y como se ve en imágenes que publican los medios locales.
También el hijo de Caruana Galizia, Matthew Caruana Galizia, culpó hoy al Gobierno de ser cómplice del asesinato al permitir una "cultura de impunidad".
"Mi madre ha sido asesinada porque se interponía entre el Estado de Derecho y quienes quieren violarlo, como muchos otros fuertes periodistas", denunció en Facebook.
Matthew Caruana Galizia, miembro del Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación (ICIJ), se refería así al hecho de que su madre fue una de las periodistas que más activamente participó en la investigación de los llamados "Papeles de Malta" que revelaron en mayo pasado cómo el país mediterráneo se había convertido en un paraíso fiscal en el seno de la Unión Europea (UE).
La investigación se produjo poco después de que se destaparan los conocidos "Papeles de Panamá", en los que la esposa de Muscat, Michelle, aparecía como propietaria de una empresa fantasma.
Estos escándalos de corrupción obligaron al primer ministro a convocar elecciones anticipadas en el país que volvió a ganar el pasado junio.
En el mensaje publicado hoy en Facebook, el hijo de la periodista criticó duramente a Muscat, su jefe de gabinete, Keith Schembri, el ministro de Economía, Chris Cardona, el de Turismo, Konrad Mizzi, y el fiscal general, y les dijo: "Sois cómplices, sois responsables de todo esto".
Ya el lunes, el líder de la oposición maltesa, Adrian Delia, denunció que este había sido un homicidio "motivado políticamente".
Por su parte, el propio Muscat reconoció que la periodista había sido una de las figuras más críticas contra su Ejecutivo, aunque calificó lo sucedido de "un acto bárbaro" y se comprometió a investigar las causas del asesinato.
Una de las noticias que más ha indignado a los malteses en las últimas horas ha sido la de la publicación de un mensaje del policía Ramon Mifsud en Facebook en el que afirmaba que "cada uno tiene lo que se merece" poco después del asesinato.
Mifsud ha sido suspendido hoy de las funciones de su cargo y será investigado por la Comisión de Servicio Público, informa el diario "Times of Malta".
El arzobispo de Malta, Charles Scicluna, ha concedido hoy una entrevista a Radio Vaticana donde afirma que "la pérdida de Daphne Caruana Galizia nos llena de tristeza y determinación para continuar defendiendo la democracia hasta el final".
"La libertad de expresión y la seguridad de los periodistas son pilares de toda democracia, y nosotros, como pueblo maltés, estamos decididos a continuar no solo promoviendo el bien de la vida entre nosotros, sino también los principios sólidos de la democracia", ha subrayado.
El arzobispo también ha aprovechado para realizar un llamamiento a la unidad en el país en favor de la democracia y a evitar los ataques verbales que generen división, y ha animado a los periodistas a defender la verdad sin miedo.
"Si no lo hacen, dejamos ganar a quienes quieren cerrar la boca a una víctima inocente matándola. Sería la victoria de la arrogancia, la prepotencia sobre la modesta pero esencial labor de los periodistas que están en primera línea en la búsqueda de la verdad", ha añadido.
Las autoridades maltesas investigan las razones del asesinato de esta periodista, casada y madre de tres hijos, una labor para la que contarán con la ayuda de agentes del FBI estadounidenses que viajarán a la isla para participar en las indagaciones. EFE