El orgullo y la soberbia deben ser descartados y en su lugar sembrar paz, justicia y fraternidad en el mundo, proclamó este domingo el Papa Francisco, quien llamó a no ceder “ante situaciones negativas de cierre y
rechazo”.
Al dirigirse a decenas de feligreses en el Vaticano, el Santo exclamo que no se puede ceder ante situaciones negativas, ni permitir estar sometidos a la mentalidad del mundo”.
En ese sentido Jorge Bergoglio desde la ventana del palacio apostólico del Vaticano y momentos antes del rezo del Ángelus, aseguró que “es necesario disminuir tanta dureza causada por el orgullo y la soberbia.
El Papa también animó a realizar “gestos concretos de reconciliación” con los demás, pidiendo perdón siempre por las faltas que se cometen.
Dijo que la conversión es completa si lleva a reconocer con humildad los errores, de cada cual, así como las infidelidades y los incumplimientos.
Finalmente, criticó la “frialdad y la indiferencia” y en su lugar apostó por la “cordialidad, la atención fraterna” y las “semillas de paz, justicia y fraternidad”.