La muerte de al menos seis personas ha causado alarma en las autoridades de salud, quienes atribuyen la tragedia a una ola de calor opresiva que ha cubierto grandes áreas de Estados Unidos ha contribuido
Reportes de prensa reseñan muertes relacionadas con el calor en los estados de Maryland, Arizona y Arkansas.
El Servicio Meteorológico Nacional (NWS por sus siglas en inglés) advirtió que una "ola de calor peligrosa" combinada con una alta humedad durante el fin de semana podría causar rápidamente estrés por calor o golpe de calor, si no se toman precauciones.
En todo el país fueron cancelados desde festivales y conciertos hasta eventos deportivos.
El Servicio Meteorológico dijo que las temperaturas se mantendrían cálidas por la noche, entre los 26 a los 28 grados centígrados, con más calor el domingo para la Costa Este.
La agencia también aconsejó a las personas que verifiquen la situación de familiares y amigos, especialmente los ancianos.
Durante un período de tres días en julio de 1995, más de 700 personas murieron en Chicago, cuando las temperaturas subieron por encima de los 36 grados centígrados.
Muchos de los que murieron eran pobres o ancianos sin acceso a aire acondicionado. Muchos también vivían solos.
A pesar de las advertencias, un corredor en Washington D.C. planeaba salir a correr el sábado temprano. "Es brutal ", dijo Jeffrey Glickman, de 37 años, y agregó:" Solo tienes que hacer el mejor esfuerzo que puedas".
Las temperaturas han aumentado en las ciudades desde el Medio Oeste a la Costa Este debido a un sistema de alta presión que ha atrapado el aire caliente.
Los funcionarios municipales están permitiendo que las piscinas públicas permanezcan abiertas por más tiempo y las ciudades están emitiendo avisos para informar al público sobre la mejor manera de lidiar con el calor.