PUERTO PRINCIPE, (Prensa Latina).- El Estado haitiano tomó posesión este sábado de la central eléctrica de Varreux, gestionada por la compañía privada Sogener, en medio de la creciente pugna entre estas dos instancias.
Osner Frevy, abogado que representa al Estado en la querella legal, dijo en sus redes sociales que la estatal Empresa de Electricidad de Haití (EDH), recuperó según una orden, el control y la posesión física de sus emplazamientos y centrales eléctricas en Varreux, situadas en la salida norte de esta capital.
En los últimos meses creció la tensión entre el Gobierno y Sogener, luego que este último se negara a saldar una deuda de unos 123 millones de dólares por supuesta sobrefacturación.
A inicios de la semana pasada, el Gobierno presentó una denuncia por corrupción ante los tribunales locales contra Réginald Vorbe Fils, Jean-Marie Vorbe, Dimitri Vorbe, Roger Lefèvre, Elizabeth Débrosse, Frantz Vérella, Serge Raphaël, Daniel Dorsainvil y «otros cómplices por identificar», divulgó la secretaría de Estado para la Comunicación.
La demanda hizo referencia a los delitos de corrupción mediante «facturación extraordinaria, falsificación, uso y beneficiarios de falsificaciones, acompañada de maniobras delictivas con el fin de enriquecer en detrimento del Estado».
Los funcionarios implicados debían presentarse la víspera a la Fiscalía de Puerto Príncipe, para responder a las acusaciones, sin embargo, esgrimieron la creciente inseguridad en Bicentenario, sede del Ministerio Público.
Newton Saint-Juste, otro de los abogados que representa al Estado, aseguró recientemente que la empresa presuntamente sobornó a funcionarios gubernamentales.
De acuerdo con el letrado, Sogener ofreció sobornos de hasta 900 mil dólares mensuales a líderes haitianos, y la presunta práctica comenzó desde la administración del expresidente René Préval (2006-2011).
En el último mes, en medio de las masivas protestas que piden la renuncia del presidente Jovenel Moïse, el mandatario acusó a integrantes del sector privado de mantener lucrativos contratos con el Estado en detrimento de los intereses de la población, aseguró.
De acuerdo con algunos hostiles al jefe de Estado, con esas medidas Moïse buscan ganar legitimidad, luego que un amplio número de sectores sociales y políticos piden su dimisión.