
República Dominicana.- La pandemia de los feminicidios y otros hechos de violencia cierran a noviembre, denominado “Mes de la Familia”, manchando con sangre.
El mes de noviembre del año que casi finaliza, registra cifras alarmantes de feminicidios y otros sucesos violentos, que atentan contra el núcleo familiar.
Entre todas esas tragedias, la de mayor conmoción social ocurrió el pasado 9 de noviembre en el sector Brisas de Edén, en Santo Domingo Este, cuando Rubén Darío Jiménez asesinó a su expareja Leyda Vicente Sánchez, de 25 años de edad, a sus padres y a un ex cuñado suyo. Ese mismo día también fue asesinada Silvia Pozo, de 27 años, y, tres días después, en Santiago, cayó Yolanny Rodríguez de 23.
República Dominicana ocupa el puesto número tres en América Latina en violencia de género, de acuerdo a la Comisión Económica para América Latina y el Caribe.
El pasado el 9 de noviembre murió en el sector Brisas del Edén, en Santo Domingo Este, a manos de su expareja, Leyda Esterlin Vicente Sánchez, de 25 años de edad. Ese mismo día también fue víctima de feminicidio, Silvia Pozo Fructuoso de 27, y tres días después, en Santiago, cayó Yolanny Rodríguez, de 23.
Como respuesta a los constantes asesinatos y agresiones contra las mujeres, el gobierno presentó el Plan Estratégico por una vida Libre de Violencia para las Mujeres, buscando protección para las dominicanas.
“A las mujeres dominicana, que denuncien, que desde el gobierno les vamos a proteger y no les soltaremos la mano hasta sacarlas del infierno al que han sido sometidas”, afirmó el presidente Luis Abinader.
Las acciones contempladas en el plan, priorizan ejes neurálgicos, con los cuales se pretende que muchas mujeres salgan del maltrato que reciben de sus parejas o ex parejas.
“Esos ejes son prevención integral, atención integral persecución y sanción, reparación integral entre otros”, dijo la ministra de la mujer, Mayra Jiménez al presentar el plan de protección.
Organismos internacionales también se han unido a la causa. Es el caso del embajador de la Unión Europea en República Dominicana, Jean Luca Gripa, quien da un espaldarazo al plan del gobierno dominicano para proteger a las mujeres.
“El objetivo general del programa es contribuir a los esfuerzos del Estado dominicano en la reducción efectiva de la violencia de género y la desigualdad”, manifestó el embajador.
Los senadores no se quedan atrás y al considerar que la familia es el sostén de toda sociedad, dicen estar de acuerdo con que se enfrenten con dureza los agresores de mujeres.
La violencia contra la mujer, que también podría definirse como un cáncer social, pone en peligro miles de mujeres y otros miembros de la familia por lo que diversos sectores consideran se necesita unir esfuerzos para combatir un flagelo que permea a presentes y futuras generaciones, distorsionando así la estabilidad y los valores de la familia.