Managua, Nicaragua.- El régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo ha elevado al máximo su pulso contra Estados Unidos al rechazar este jueves al nuevo embajador nombrado por Washington, Hugo Rodríguez, para ocupar la legación norteamericana en Managua. Pocas horas después que el diplomático fuera ratificado por el Senado, el canciller de Nicaragua, Denis Moncada, leyó en cadena nacional un comunicado a través del cual cancelaron el “beneplácito” al representante del Gobierno de Joe Biden.
El canciller Moncada dijo que rechazaron a Rodríguez por haber realizado declaraciones “injerencistas e irrespetuosas” en contra del país, “desconociendo los principios del derecho internacional” durante la ceremonia de ratificación en el Senado este jueves. Rodríguez, que reemplazaría en sus funciones al actual embajador de Washington en Managua, Kevin Sullivan, criticó la represión que vive el país centroamericano.
“Estados Unidos se ha pronunciado en contra de estos abusos y, de confirmarse, continuaré haciéndolo, no porque tengamos la intención de determinar los asuntos internos de Nicaragua, sino porque es nuestro compromiso bajo la Carta Interamericana, que tanto Estados Unidos y Nicaragua firmaron en 2001″, expresó Rodríguez. “Como ha declarado el presidente Biden, la Carta Democrática Interamericana obliga al hemisferio a defender los derechos democráticos del pueblo nicaragüense”.
La cancelación del “beneplácito” abre otro espinoso capítulo entre los Ortega-Murillo y Estados Unidos, cuando los desencuentros abundan en la ya de por sí accidentada relación: hace casi tres meses, según The New York Times, Laureno Ortega Murillo, hijo de la pareja presidencial, buscó silenciosamente un acercamiento con Washington para “aliviar las sanciones” impuestas a su entorno familiar. Sin embargo, todo encalló porque el régimen sandinista rechazó tajantemente una de las condiciones de Estados Unidos para sentarse a conversar: la liberación de todos los presos políticos en Nicaragua.
Este 19 de julio, durante la conmemoración del 43 aniversario de la revolución sandinista, Ortega mismo descartó su intención de no dialogar de ninguna forma con Washington, aduciendo que las negociaciones “son para poner la soga al cuello a uno, o que uno mismo se ponga la soga en el cuello”. El 20 de julio, Estados Unidos respondió con la inclusión en la Lista Engel de 23 jueces y fiscales orteguistas, sancionados por condenar a presos políticos.
En la misma jornada el Gobierno Biden también anunció la exclusión de Nicaragua de la cuota anual de importación de azúcar acordada con la Organización Mundial de Comercio (OMC). Por otro lado, la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC) del Departamento del Tesoro sancionó el 17 de junio pasado a la Empresa Nicaragüense de Minas (Eniminas), y al presidente de su junta directiva, Ruy López Delgado. La sanción representó un duro golpe para la exportación de oro, uno de los principales rubros que mayores ingresos generan a Nicaragua. A esa sanción de la OFAC le antecedió la cancelación de 93 visas de funcionarios sandinistas.