37% más crimen este año: violencia y anarquía en un dramático verano en Nueva York

La cantidad de homicidios, tiroteos y víctimas en general de la violencia armada en la ciudad de Nueva York en el recién culminado julio experimentó aumentos porcentuales de dos dígitos en comparación con el mismo mes del año pasado, según las nuevas estadísticas.

Las cifras preocupantes han ayudado a impulsar un aumento de 36.8% en los delitos graves en general en lo que va del año en comparación con el mismo período en 2021, lo que continúa con una tendencia sombría.

“Tengo miedo todos los días que salgo por la puerta”, dijo al New York Post una trabajadora de mantenimiento de Brooklyn de 51 años que sólo se identificó como Vee. “Las balas no tienen nombre”, se lamentó el residente de East New York.

“Las balas no tienen nombre”

Residente de Brooklyn, NYC

Las siete principales categorías delictivas de NYC llevan un incremento general de 36.8% en lo que va del año, impulsado principalmente por hurtos mayores, robos de automóviles y otros robos. Esa cifra es superior al 31.1% que el mismo índice de criminalidad tenía al cierre de junio.

En general, en lo que va del año en comparación con el mismo período de 2021, los hurtos mayores aumentaron 48%, de 19,624 casos a 29,129; los robos de automóviles se dispararon 43%, de 5,345 a 7,444; y otros robos subieron 39.4%, de 7,099 a 9,893 incidentes, según los datos de NYPD hasta el domingo 31 de julio.

La buena noticia es que asesinatos se redujeron 4.2% en lo que va del año en comparación con 2021, y las víctimas y las balaceras bajaron 6% y 7.8%, respectivamente.

Pero específicamente en julio los asesinatos experimentaron un aumento del 35% en comparación con el mismo mes del año pasado, pasando de 31 a 42 casos. Las víctimas de disparos y los incidentes con armas también subieron casi 10%.

Estas cifras confirman los temores de los expertos de que Nueva York iba a vivir un auge de violencia este verano, tanto con armas de fuego como blancas.

En NYC la violencia armada continúa desatada en 2022, especialmente con jóvenes atacantes y victimarios, poniendo un gran reto al nuevo alcalde Eric Adams, quien desde que asumió el cargo en enero ha encontrado obstáculos dentro de su propio partido demócrata y líderes de “Black Lives Matter” (BLM) para enfrentar la crisis.