Santo Domingo. República Dominicana. – El Banco Central de la República Dominicana, en interés de mantener debidamente edificados a los agentes económicos y al público en general y como parte de su compromiso con la transparencia y la divulgación oportuna de datos, informa sobre los resultados preliminares de la economía al mes de julio del año 2022.
El indicador mensual de actividad económica (IMAE) registra una variación promedio acumulada de 5.5 % en el periodo enero-julio 2022 en comparación con igual período del año anterior, luego de haber experimentado un aumento interanual de 4.7 % en el mes de julio, similar a las tasas de crecimiento de abril y mayo de 4.7 % y 4.8 %, respectivamente.
La expansión acumulada hasta el momento permite mantener el pronóstico de que la economía estaría finalizando el año con un incremento del producto interno bruto (PIB) en torno a su potencial, en consonancia con las proyecciones del Fondo Monetario Internacional (FMI) y la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL). Este último organismo la situó en 5.3 %, entre los mejores desempeños en la región y prácticamente el doble del promedio de crecimiento de 2.7 % que se espera para la región.
A esta proyección estarían contribuyendo la continuación de las iniciativas de inversión privada asociadas a los flujos de inversión extranjera directa (IED) que se espera que alcancen un monto superior a los US$3,500 millones en el presente año, así como la ejecución de los proyectos de inversión pública anunciados por el presidente Luis Abinader y contemplados en el presupuesto. Estas perspectivas favorables reflejan la resiliencia de la economía dominicana en el contexto de un entorno internacional adverso y caracterizado por una desaceleración en las perspectivas de crecimiento globales.
Al analizar en detalle el comportamiento de las actividades económicas que sustentaron el resultado de enero-julio de 2022, inciden en gran medida las actividades económicas de servicios, que en su conjunto constituyen aproximadamente el 60.0 % del tamaño de la economía y registraron una variación interanual de 7.6 % en el referido periodo, destacándose hoteles, bares y restaurantes (32.9 %), salud (11.4 %), transporte (7.3 %), comercio (6.3 %), servicios financieros (5.8 %), entre otros.
La actividad hoteles, bares y restaurantes exhibió una variación interanual promedio de 32.9 % en términos de valor agregado real, aportando 1.8 puntos porcentuales (p.p.) al crecimiento del IMAE de 5.5 % en enero-julio de 2022, es decir, explicando la tercera parte de la expansión económica registrada en el presente año. El dinamismo de este sector estuvo impulsado por la demanda externa de los servicios turísticos que ofrece el país, reflejado en la llegada de 4,282,207 pasajeros no residentes durante los primeros siete meses del año, equivalente a un crecimiento interanual de 74.0 %, así como una tasa de ocupación promedio de habitaciones superior al 70 %. Asimismo, se destaca la afluencia en el mes de julio de 735 mil turistas, un máximo histórico que supera en 30.3 % la llegada de pasajeros en dicho período del año anterior, según las informaciones oficiales ofrecidas por el Ministerio de Turismo.
Por otro lado, los incrementos del valor agregado real en las actividades de comercio (6.3 %) y de transporte y almacenamiento (7.3 %), respectivamente, reflejan los mayores niveles de producción, distribución y comercialización de bienes agropecuarios y manufacturados tanto de origen local como importado. Estas actividades aportan 1.3 puntos porcentuales de la variación interanual de 5.5 % que presenta el IMAE de enero-julio 2022.
De igual forma, el comportamiento de las zonas francas incidió en el resultado del IMAE en enero-julio 2022, con una variación acumulada interanual de 7.2 % en su valor agregado real, cónsono con el incremento interanual de 12.8 % de las exportaciones de los bienes producidos por el sector. En el caso particular del mes de julio, las mismas alcanzaron US$643.9 millones, impulsadas principalmente por las de equipos médicos y productos textiles.
Adicionalmente, el crecimiento interanual de 4.3 % del valor agregado de la manufactura local estuvo impulsado por las industrias de elaboración de bebidas (9.6 %), productos químicos (9.2 %) y aceites y grasas (6.9 %).
En otro orden, el sector agropecuario registró un crecimiento promedio de 2.9 % en enero-julio, exhibiendo una tendencia a la mejoría en los últimos dos meses. Vale puntualizar que en el desempeño de este sector han incidido las medidas oportunas implementadas por el Gobierno del presidente Luis Abinader, a través del Ministerio de Agricultura y sus dependencias, con el interés de brindar apoyo técnico y financiero a los productores agropecuarios a nivel nacional.
Cabe destacar que, el desempeño del crédito al sector privado en moneda nacional contribuyó al resultado del IMAE, registrando un crecimiento de 13.9 % en términos interanuales al cierre de julio de 2022. Este dinamismo en los préstamos al sector privado en moneda nacional está impulsado principalmente por el financiamiento al sector agropecuario, microempresas, consumo, adquisición de viviendas y construcción. Al incluir los recursos canalizados en moneda extranjera, los préstamos privados totales crecieron 15.1 % en dicho periodo.
Si bien es cierto que el crédito aún muestra un comportamiento dinámico, las tasas de interés han estado aumentando en respuesta a las medidas de retiro gradual y ordenado del estímulo monetario del Banco Central de la República Dominicana para combatir la inflación y evitar el sobrecalentamiento de la economía, tal y como lo han hecho la mayoría de los bancos centrales a nivel mundial. En ese sentido se observa que al cierre de julio de 2022 la tasa de interés pasiva (anual) promedio ponderado de la banca múltiple se posicionó en 8.1 %, mientras que la tasa de interés activa (anual) promedio ponderado se ubicó en 11.8 %, situándose el promedio de lo que ha transcurrido en el mes de agosto por encima de 12 %, aún por debajo del nivel que existía previo a la pandemia. Es importante resaltar que las tasas de interés de mercado no registran niveles superiores por el efecto de los recursos aún vigentes ascendentes a RD$125,000 millones de los RD$215,000 millones facilitados por la autoridad monetaria durante la pandemia, los cuales fueron colocados por los intermediarios financieros a tasas fijas de hasta 8 % por un período de 3-4 años.
Vale la pena mencionar, que las tasas de interés de los préstamos orientados a algunos sectores como el hipotecario y el de consumo han registrado mayores incrementos que otros renglones, sin embargo, el crédito canalizado a estas actividades aún mantiene un dinamismo importante.
En otro orden, el sector externo continúa mostrando un desempeño favorable al mes de julio de 2022. Dentro de estas variables se destacan las exportaciones, las cuales registraron un valor de US$1,186.7 millones en el mes de julio de 2022, para un aumento interanual de US$131.0 millones (12.4 %). De manera acumulada, entre enero y julio las exportaciones ascendieron a US$8,199.2 millones, mostrando un crecimiento de US$1,122.4 millones (15.9 %). Las exportaciones nacionales se situaron en US$3,596.8 millones, mostrando un aumento de US$599.5 millones (20.0 %), mientras que las exportaciones de zonas francas alcanzaron unos US$4,602.4 millones, con una variación interanual de 12.8 %.
En ese sentido, la evolución positiva de las actividades generadoras de divisas, incluyendo la entrada de remesas por US$5,669.7 millones en enero-julio de 2022, favoreció la estabilidad relativa del tipo de cambio, reflejada en una apreciación acumulada de la moneda local de 5.3 % al cierre de julio y que ha superado el 7 % hasta la última fecha disponible de agosto, tanto en términos acumulados como interanuales. Asimismo, se fortalecieron las reservas internacionales hasta ubicarse por encima de US$14,000 millones, equivalentes a cerca de 13.0 % del PIB y 5.9 meses de importaciones, superando las métricas recomendadas por el FMI.
Finalmente, como se puede apreciar el resultado de la economía en el periodo enero-julio es una muestra fehaciente de los fuertes fundamentos macroeconómicos de la economía dominicana y de que el país avanza en la senda correcta, aún en el contexto de la desafiante coyuntura internacional.