El mánager de los Chicago White Sox Tony La Russa estará fuera indefinidamente debido a un problema médico no especificado, anunció el equipo el miércoles.
El entrenador de banca Miguel Cairo dirigirá a los Medias Blancas de forma interina mientras La Russa se somete a pruebas con sus médicos personales en Arizona.
"Es increíblemente difícil", dijo el jardinero Andrew Vaughn. "Realmente no tenemos mucha información sobre lo que está pasando".
Cairo dijo tras la derrota del martes ante los Kansas City Royals que los Medias Blancas esperaban saber más sobre el estado de La Russa el miércoles.
"Vamos a tenerlo en nuestros pensamientos y esperamos que todo esté bien", dijo Cairo.
La ausencia de La Russa el martes se anunció aproximadamente una hora antes del primer lanzamiento. El miembro del Salón de la Fama no mostró signos de problemas de salud durante su sesión previa al juego con los reporteros y mientras hablaba con el gerente general Rick Hahn y el ex as de los Oakland Athletics Dave Stewart antes del partido.
La Russa está en la segunda temporada de su segunda etapa como mánager con Chicago. El equipo comenzó el año con aspiraciones de campeonato, pero ha sido una de las mayores decepciones del béisbol.
De cara al segundo juego de su serie contra los Royals, los White Sox habían perdido cinco seguidos para caer a 63-66. Cánticos de "¡Despidan a Tony! ¡Despidan a Tony!" han sido escuchados en el Guaranteed Rate Field.
La Russa, quien es amigo cercano del presidente de los Medias Blancas, Jerry Reinsdorf, fue una contratación sorpresiva en octubre de 2020 y dirigió al equipo al título de la División Central de la Liga Americana el año pasado. Comenzó su carrera como mánager con los Medias Blancas durante la temporada de 1979. Ganó la Serie Mundial con Oakland en 1989 y St. Louis en 2006 y 2011.
La Russa y Sparky Anderson son los únicos entrenadores en ganar la Serie Mundial en las ligas Americana y Nacional.
La Russa fue exaltado al Salón de la Fama en Cooperstown en 2014. Consiguió su primer trabajo de mánager de Grandes Ligas a los 34 años cuando los White Sox lo ascendieron de Triple-A para reemplazar al despedido Don Kessinger. Se hizo cargo ese agosto y los llevó a un récord de 522-510 en partes de ocho temporadas.
