Estados Unidos apoyara la alianza promovida por el presidente Luis Abinader con Costa Rica y Panamá para fortalecer, en democracia y libertad, la competitividad, el desarrollo socioeconómico y la creación de empleo, a través del comercio y la inversión.
Ese tema será tratado la próxima semana en Washington con el mandatario dominicano en una reunión oficial con a vicepresidente norteamericana Kamala Harris.
Esta iniciativa de la gobernante dominicana, que también ha motivado el interés de otras naciones latinoamericanas, como Ecuador, se ha propuesto trabajar juntos a Estados Unidos en el fortalecimiento de la integración económica, la promoción de mayores flujos de comercio e inversión, la reducción de vulnerabilidades presentes en las cadenas de suministro y el aprovechamiento óptimo de la proximidad geográfica de sus mercados, y la coincidencia de intereses entre ese grupo de naciones.
Antes de que se anunciara al encuentro de Abinader y Harris, la vicepresidenta de los Estados Unidos adelanto que la administración actual de esa potencia norteamericana, dirigida por el presidente Joe Biden, estaba ansiosa por asociarse a las iniciativas de desarrollo, prosperidad e inclusividad que promueve la Alianza para el Desarrollo en Democracia (ADD).
También propuestas y acciones para contrarrestar la corrupción, promover la igualdad de género, defender la libertad de expresión, encontrar soluciones para la migración irregular y reforzar la inversión del sector privado.
La vicemandataria Harris destacó que los derechos humanos, el Estado de Derecho y la igualdad para todos son principios básicos que han guiado las democracias por años y defenderlos es el trabajo vital de cada generación.
La alianza
Los presidentes de República Dominicana, Luis Abinader; Costa Rica, Carlos Alvarado Quesada y Panamá, Laurentino Cortizo Cohen firmaron una declaración en donde reiteraron su voluntad de trabajar decisivamente en la promoción de acciones concretas para el crecimiento económico de sus pueblos, sobre la base del respeto de los derechos humanos, la sostenibilidad y los valores democráticos.
Asimismo, la recuperación económica sostenible e inclusiva, la lucha contra el cambio climático, la atención a las necesidades de salud de sus pueblos, la creación de empleos decentes, bajo la premisa indiscutible de que las acciones de hoy moldearán las realidades del mañana.
Tras la firma de la Declaración de San José, los gobernantes de República Dominicana, Costa Rica y Panamá declararon respecto al comercio e inversión que consideran prioritario el fortalecimiento de las cadenas de suministro regionales.
Por lo que se comprometieron a garantizar la implementación de políticas públicas en sus estados que promuevan los objetivos compartidos de una inversión que fomente una alianza estratégica para incrementar los flujos comerciales.
“Por esto, reiteramos nuestro compromiso de avanzar con el cumplimiento de los propósitos establecidos en el Memorándum de Entendimiento suscrito por los ministros de Comercio Exterior de la República de Costa Rica, la República Dominicana y la República de Panamá, en diciembre de 2021”, expresa el documento.
E.E.U.U. aliado estratégico
Indican en el documento que para ello, conformaron un grupo de trabajo entre los cuatro países, en el cual analizarán la puesta en marcha de propuestas concretas que les permitan insertarse de manera más eficiente en las cadenas de suministro de las empresas de origen estadounidense, especialmente en áreas claves de los sectores de manufactura y servicios, con miras a potenciar su crecimiento y el impacto positivo que este provoca en el impulso de objetivos de desarrollo sostenible, incluyente y resiliente.
Los presidentes de RD, Costa Rica y Panamá junto a sus respectivos cancilleres
En el punto 17 de la Declaración de San José en el marco de la ADD se acordó de igual modo, solicitar a los organismos multilaterales el establecimiento de líneas de emergencias rápidas y mecanismos de garantía de la deuda para solventar el financiamiento de los distintos países en momentos de crisis.
Por otra parte, impulsar el establecimiento de líneas y/o financiamiento a Gobiernos Locales e instituciones públicas no pertenecientes a los Gobiernos Centrales, sin garantía soberana. “Asimismo, se acuerda solicitar al Fondo Monetario Internacional (FMI) líneas de alivio de deuda (Debt Relief), para países de ingreso medio, a fin de propiciar la sostenibilidad de la deuda a lo largo del tiempo”.