La dominicana Teresa Castillo, residente en el Alto Manhattan, dice que desde marzo 2020 nada ha sido lo mismo después de haber estado con síntomas muy graves por el COVID-19y que, aunque ha superado la enfermedad aún casi dos años después sigue sintiendo muchas de las secuelas asociadas con este.
No ha logrado recuperar el olfato y siente un zumbido dentro de sus oídos. Parecido al caso de ella, hay muchas más personas que han venido sufriendo de distintas secuelas provocadas por la enfermedad. Ella, al igual que muchos otros residentes de la Gran Manzana, no han vuelto a ser los mismos después de la pandemia y es que estudios demuestran que una gran población femenina que vive en Nueva York ha resultado ser una de las más afectadas por el COVID-19. De acuerdo con algunas aproximaciones, Nueva York fue la ciudad más lastimada por los efectos del COVID-19.
Se calcula que aproximadamente un 28% de las mujeres de la ciudad de Nueva York todavía hoy en día presentan distintos síntomas. Estas cifras son apoyadas por la Dra. Celia Quinn, Sub-Comisionada de Control de Enfermedad del Departamento de Salud de la Ciudad de Nueva York, quien informó que hay al menos un síntoma que se ha presentado en muchos casos, en comparación con el 21% de los hombres. En general, el 30% de los adultos de la ciudad, con un caso anterior de COVID-19, pueden experimentar algún tipo prolongado de COVID.
El periódico New York Times reveló que al menos el 60% de los afectados en Nueva York fueron hombres.
Nueva York sigue luchando contra los efectos del COVID-19.
