Salvo dos presidentes de transición, el resto de políticos que se ha sentado en Palacio de Gobierno ha tenido líos con la justicia y en algún momento ha dormido en una cárcel
Lima, PERU( Renzo Gómez). .- Desde que empezó este milenio, casi todos los peruanos que se han colocado la banda presidencial han terminado presos, fugados o cuando menos manchados por los tentáculos de la corrupción. En el último tiempo, además, se ha producido un quiebre al parecer irreconciliable entre el Congreso y el Ejecutivo. El resultado: seis presidentes en cuatro años. Hace poco, Dina Boluarte se convirtió en la primera presidenta mujer del país. Un acontecimiento histórico que ha pasado desapercibido rápidamente por la grave crisis social, que ha dado paso a un nuevo capítulo sangriento de la realidad peruana. Este es un breve repaso de los últimos 10 presidentes del Perú.
Alberto Fujimori Fujimori
Se hizo con el poder en el año 1990 tras derrotar sorpresivamente al escritor Mario Vargas Llosa en la segunda vuelta. Ingeniero agrónomo de profesión de ascendencia japonesa, Fujimori fue un auténtico outsider, pues no contaba con un historial político. En abril de 1992, dio un autogolpe de Estado, disolviendo el Congreso de la República. Al año siguiente instauró la Constitución Política de 1993 —que le permitió reelegirse en dos ocasiones—, y que rige al Perú hasta la actualidad. En su mandato se produjo una guerra civil que ya había dado visos desde los años ochenta. Hecho que capitalizó para reprimir con dureza a sus opositores, y que trajo consigo muchas víctimas inocentes.
En los primeros meses de su tercer periodo, en noviembre de 2000, renunció vía fax desde Japón ante las evidencias de corrupción y violación de derechos humanos. En septiembre de 2007, Fujimori fue extraditado de Chile a Perú. Desde entonces purga condena por un cúmulo de delitos: homicidio calificado, usurpación de funciones, malversación de fondos, peculado doloso, espionaje telefónico, compra de los medios de comunicación, entre otros. Salió en libertad en diciembre de 2017 tras concedérsele un indulto humanitario, pero regresó a la cárcel después que se revocara la medida.
Valentín Paniagua Corazao
Tras la caída del régimen de Alberto Fujimori, Paniagua asumió las riendas del país en noviembre del año 2000, convirtiéndose en el primer mandatario peruano por sucesión constitucional en este siglo. En sus ocho meses de mandato renovó el Poder Judicial, liberó a presos políticos y lideró el nuevo proceso electoral. No tuvo acusaciones en su contra
Alejandro Toledo Manrique
Fue el primer gran opositor del fujimorismo y, bajo el paraguas de su agrupación Perú Posible, asumió la Presidencia del Perú entre el 2001 y el 2006. Despertó esperanza en la población, debido a que su elección se dio en un marco democrático tras una década de autoritarismo. Su historia de superación lo ayudaba: era de origen humilde y realizó estudios de maestría en universidades de los Estados Unidos. Pero este economista se vio embarrado por el caso Odebrecht. Según las investigaciones habría recibido 20 millones de dólares en sobornos. En febrero de 2017 se ordenó su captura y 18 meses de prisión preventiva, pero Toledo burló a las autoridades peruanas y estuvo prófugo de la justicia durante dos años y cinco meses hasta que fue detenido en California. Hoy se encuentra en libertad bajo fianza en los Estados Unidos. Su proceso de extradición está en curso.
Alan García Pérez
A pesar de haber tenido un catastrófico primer Gobierno entre 1985 y 1990 con una hiperinflación que devaluó la moneda nacional, el Perú le dio una segunda oportunidad al líder del Partido Aprista Peruano entre el 2006 y el 2011. Político de amplia trayectoria, enfrentó diversos conflictos sociales, entre ellos el denominado Baguazo, donde fallecieron 33 personas, entre policías y ciudadanos, en el 2009. Una huella imborrable de su mandato, pues además tildó a los manifestantes de las poblaciones indígenas de “no ser ciudadanos de primera clase”. Dueño una verborrea que despertaba la admiración del electorado, nunca aceptó haber cometido algún acto ilícito durante su carrera política. No obstante, Alan García, como otros Jefes de Estado en la región, se vio involucrado con el caso Lava Jato. En abril de 2019, con las evidencias en su contra y un pedido fiscal de prisión preventiva por notificar, García se disparó en la sien y falleció sin ser juzgado.
Ollanta Humala Tasso
Es el último presidente del Perú que cumplió su mandato. Gobernó desde julio de 2011 hasta julio de 2016. Militar con estudios de administración, alcanzó el grado de teniente coronel del Ejército. Líder del Partido Nacionalista llegó al poder como un antistema, provocando los temores de la derecha y el empresariado, pero finalmente se adecuó al establishment. Durante su gestión estalló el caso Odebrecht, una constructora brasileña que financiaba campañas electorales de candidatos presidenciales en Sudamérica a cambio de beneficiarse con licitaciones de obras públicas. Uno de los supuestos beneficiarios fue Humala y su partido. Por tal motivo fue acusado de lavado de activos y de asociación ilícita para delinquir. Humala y Nadine Heredia, la primera dama, estuvieron en prisión preventiva durante nueve meses entre el 2017 y el 2018. Su caso sigue abierto.
Pedro Pablo Kuczyinski
Economista peruano de origen polaco, dirigió los destinos del Perú entre julio de 2016 y marzo de 2018. Se convirtió en presidente del Perú por un estrechísimo margen de votos sobre su contendora Keiko Fujimori en segunda vuelta. Tan solo por 42.000 votos. Si bien contaba con el espaldarazo del sector empresarial, su triunfo se debió en gran medida a la principal fuerza política del Perú: el antifujimorismo. Ello provocó una hostilidad permanente que le impidió gobernar, pues el Congreso contaba con una arrolladora mayoría de miembros de la agrupación política Fuerza Popular.
En diciembre de 2017, PPK —como se le conoce— fue relacionado con el escándalo Lava Jato. Esto motivó que la Cámara solicitara su vacancia. En ese lapso, se descubrió que PPK negoció con Kenji Fujimori, hermano menor de Keiko, la compra de votos para no ser destituido a cambio de la liberación de su padre: el expresidente Alberto Fujimori. El destape desató el caos y, con ello, su renuncia. En abril de 2019 dictaron 36 meses de privisión preventiva por el supuesto delito de lavado de activos cuando fue ministro en el Gobierno de Alejandro Toledo. Se determinó que cumpliera arresto domiciliario por su delicado estado de salud, medida que culminó en la primera mitad del 2022. Sigue su proceso judicial en libertad.
Martín Vizcarra Cornejo
No fue elegido por el pueblo, pero gozó del apoyo popular durante gran parte de su mandato entre marzo de 2018 y noviembre de 2020. Según las encuestadoras, en algún momento alcanzó el 83% de aprobación. Se sentó en el trono del Perú por ser el primer vicepresidente del economista Pedro Pablo Kuczyinski, quien renunció a su cargo. Al año y medio de su gestión disolvió el Congreso, con un respaldo del 85% de la población. Sin embargo, los nuevos representantes de la Cámara lograron su salida por presuntos delitos de corrupción cuando fue gobernador regional de Moquegua, una región de la costa sur donde nació.
La imagen de Vizcarra quedó desvirtuada con el vacunagate, escándalo internacional que destapó el tráfico de vacunas contra la covid-19 en el Perú durante la primera ola. En abril de 2021 postuló al Congreso e increíblemente fue el más votado (165.000 votos), pero no pudo ejercer al ser inhabilitado. El Ministerio Público acaba de solicitar contra Vizcarra 15 años de pena privativa de la libertad por el delito de cohecho pasivo propio al verse envuelto en el cobro de sobornos en obras públicas.
Manuel Merino de Lama
Su mandato no llegó a la semana: apenas duró cinco días. Del 10 al 15 de noviembre de 2020. Si bien el Congreso de la República reconoce su investidura, gran parte de la sociedad civil cuestiona si realmente debe considerársele como presidente. Militante de Acción Popular, uno de los pocos partidos que mantiene un papel activo en la política peruana, Merino se cruzó la banda presidencial luego de la salida de Martín Vizcarra por incapacidad moral. Pero tuvo que renunciar inmediatamente por las protestas contra su nombramiento que dejaron un saldo de dos fallecidos y un centenar de heridos. En junio de 2022, en un hecho criticado por la Defensoría del Pueblo, la Cámara lo exculpó de toda responsabilidad políticas de estas muertes. Por tal motivo, Merino no fue investigado.
Francisco Sagasti Hochhausle
Asumió la presidencia de forma interina en noviembre del 2020, como titular del Congreso de la República, en uno de los momentos más críticos del pasado reciente. Por un lado, el Perú vivía un estallido social tras la salida de Martín Vizcarra y por otro, enfrentaba la crisis sanitaria a causa del nuevo coronavirus sin vacunas y con un sistema de salud colapsado. Por esos días, Perú tenía la mayor tasa de mortalidad en el mundo por la covid. Sagasti gobernó durante ocho meses con varios sobresaltos: enfrentó un paro agrario y la desconfianza de un grupo de parlamentarios que dudaban de su convocatoria a elecciones. Lo que más se rescata de ese breve periodo es haber concretado la compra y distribución de las vacunas. No posee investigaciones en curso.
Pedro Castillo Terrones
El último presidente peruano elegido en las urnas ascendió al poder tras unas reñidas elecciones con la líderde Fuerza Popular, Keiko Fujimori. Bajo el símbolo del lápiz de la agrupación política Perú Libre, Castillo, cajamarquino de nacimiento, se ganó al electorado de las zonas más vulnerables del país con la promesa de un cambio de la Constitución. Pero el maestro sindical —que hasta entonces no había ocupado ningún cargo público— jamás pudo asentarse en Palacio. Las razones son varias: escasa capacidad de gestión, rodearse de funcionarios cuestionados, y el obstruccionismo de la oposición. Tuvo 78 ministros en dieciesiete meses de gobierno, y fue destituido el 7 de diciembre de 2022 en el tercer intento de vacancia tras un frustrado autogolpe de Estado. Actualmente, cumple una prisión preventiva de 18 meses, acusado por los delitos de rebelión y conspiración. Además es investigado por la Fiscalía de la Nación por presuntamente liderar una organización criminal.