HAITI.– La administración Biden escalará dramáticamente la deportación de cubanos, haitianos y nicaragüenses a México si cruzan ilegalmente la frontera de Estados Unidos. Al mismo tiempo, la administración ha decidido ampliar significativamente un programa de libertad condicional que permite que 30.000 ciudadanos de cuatro países vengan a vivir y trabajar en los Estados Unidos durante dos años cada mes si cuentan con el apoyo necesario.
Las nuevas medidas, que incluyen un mayor uso de "expulsiones aceleradas", un proceso de deportación rápido, se promocionaron como parte de una nueva iniciativa de la administración Biden para frenar la inmigración ilegal.
“En los últimos años, miles de personas han huido de los países de Centroamérica, Sudamérica y el Caribe gobernados por dictadores opresores, incluidos Cuba, Nicaragua y Venezuela, y escaparon de la violencia de las pandillas, que tiene el mismo impacto en Haití”, dijo Biden.
“Actualmente, estos cuatro países representan la mayoría de las personas que viajan a México para comenzar una nueva vida yendo a la frontera de Estados Unidos, tratando de cruzarla”, agregó.
“Pero en lugar de un procesamiento seguro y ordenado en la frontera, tenemos un sistema fragmentado que simplemente no funciona como debería. No tenemos suficientes oficiales o personal de asilo para determinar si las personas son elegibles”, dijo el presidente de los Estados Unidos, Joe Biden.
“Aquellos que no buscaron protección en un país por el que viajaron a Estados Unidos tampoco podrán obtener asilo en Estados Unidos a menos que cumplan con excepciones específicas”, dijo Alejandro Mayorkas, jefe del Departamento de Seguridad Nacional. “Las personas que no puedan establecer un reclamo válido de protección con el estándar establecido en la nueva regla estarán sujetas a la pronta remoción”, advirtió.
La administración estadounidense dice que la nueva vía legal se basa en el éxito de un programa similar al que ya está en marcha para los venezolanos, que ha reducido en un 90% la cantidad de inmigrantes indocumentados de la nación sudamericana.
Los funcionarios de la administración dijeron que hasta 30,000 personas por mes de esos cuatro países, que tienen un patrocinador elegible en los Estados Unidos para brindar apoyo financiero y que pasan rigurosos controles de seguridad y cumplen con los requisitos de vacunación y otros requisitos de salud pública, podrán venir al Estados Unidos durante dos años y recibir autorización de trabajo.
Si bien los activistas creen que el mayor uso de la deportación acelerada limitará la capacidad de los haitianos, cubanos y nicaragüenses para buscar asilo en la frontera, un alto funcionario de la administración de Biden dijo que el nuevo programa de libertad condicional marca un cambio significativo para los haitianos, cubanos y nicaragüenses que buscan una ruta legal. a los Estados Unidos. “Consideramos que este es un momento decisivo, de una magnitud sin precedentes”, dijo el funcionario. Si observa las vías legales existentes que están disponibles para estos ciudadanos de Venezuela, Cuba, Haití, Nicaragua, y lo que ahora estará disponible para ellos hoy, y qué tan innovadoras y accesibles son esas vías”, continuó el funcionario,
Las personas que ingresan ilegalmente a los Estados Unidos, y que no son deportadas bajo el Título 42, una orden ejecutiva de salud pública que autoriza al gobierno a rechazar a los migrantes por razones de pandemia, serán enviadas de regreso a México o a su país de origen y sujetas a una prohibición de reingreso de cinco años, dijeron las autoridades.
Pero los migrantes que crucen la frontera panameña, mexicana o estadounidense después de la fecha del anuncio no podrán beneficiarse del proceso de libertad condicional y serán enviados de regreso a México. Según los funcionarios, el gobierno mexicano acordó recibir hasta 30,000 migrantes de estos cuatro países por mes. Un funcionario del Departamento de Seguridad Nacional dijo que la nueva orden se aplicaría a los ciudadanos de los cuatro países enumerados que intenten ingresar ilegalmente al país en cualquier lugar, incluido el cruce del Estrecho de Florida.
Un funcionario de la Casa Blanca dijo además que aquellos que crucen el Estrecho de Florida también enfrentarán nuevas consecuencias. “Cualquiera de estos cuatro países que ingrese ilegalmente a Estados Unidos, ya sea por tierra o mar, no será elegible para los nuevos programas de libertad condicional y puede estar sujeto a una prohibición de entrada de cinco años”, dijo el funcionario a McClatchy y al Miami Herald. . "Podemos brindar ayuda humanitaria de acuerdo con nuestros valores, eliminar organizaciones viciosas de contrabando y defender nuestras leyes", dijo Mayorkas en un comunicado.
“Las personas que no tengan una base legal para permanecer en los Estados Unidos estarán sujetas a una pronta deportación o remoción. Las personas que disfrutan de una ruta segura, ordenada y legal a los Estados Unidos tienen menos probabilidades de arriesgar sus vidas viajando miles de millas a manos de contrabandistas despiadados, solo para llegar a nuestra frontera sur y enfrentar las consecuencias legales de 'entrada ilegal, ', advirtió el funcionario estadounidense.
El anuncio se produce cuando cientos de cubanos han llegado a las costas de los Cayos de Florida desde el fin de semana pasado, abrumando a las autoridades locales y generando temores de una migración masiva, y mientras Biden considera un posible viaje a la frontera entre Estados Unidos y México la próxima semana. El anuncio de Biden sigue a la reanudación completa del procesamiento de visas de inmigración en la Embajada de EE. UU. en La Habana esta semana, después de años de que los cubanos tuvieran que viajar a Guyana para entrevistas de inmigración.
Según datos oficiales, cerca de 225 000 cubanos llegaron a Estados Unidos en 2022, un éxodo mayor que el del Puente Marítimo del Mariel en 1980, cuando llegaron a Florida 125 000 personas. Solo en noviembre, la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de EE. UU. tuvo 35 849 encuentros con ciudadanos cubanos en todo el país, principalmente en la frontera con México, un número más alto que en cualquier mes del año fiscal 2022. Desde el 1 de octubre, más de 4000 cubanos han sido arrestados en el mar por la Guardia Costera de EE.
También ha aumentado el número de nicaragüenses y haitianos que intentan cruzar la frontera entre Estados Unidos y México. En el año fiscal 2022, que finalizó el 30 de septiembre, Aduanas y Protección Fronteriza registró casi 164.000 encuentros con nicaragüenses, frente a los 50.000 del año anterior, según datos federales. Durante el mismo período llegaron a la frontera 54.000 haitianos frente a los 47.000 en 2021 y alrededor de 4.500 en 2020.
