Santo Domingo, RD (Por Andrés Díaz)-.- Hasta hace poco tiempo los programas de arte y espectáculos de la República Dominicana estuvieron entre los de mayor aceptación de la radio e incluso de la televisión con una audiencia que cautivaba a grandes y chicos.
Antes la radio nacional en sus diferentes horarios contaba con una buena cantidad de programas de farándula como eran llamados, conducidos por profesionales de la crónica de arte y espectáculos que se ganaron la credibilidad y el seguimiento de miles de oyentes.
Fueron muchos los programas líderes de la radio, pero entre ellos, los hubo que se convirtieron en los de mayor audiencia y efectividad en las noticias de farándula o del mundo del espectáculos lo que le valió permanecer por muchos años en el interés del publico.
Dos de los más prominentes “De Todo un Poco”, con la producción y dirección de Mundito Espinal y “Arte Nacional en Radio” producido y conducido por Joseph Cáceres. Se puede decir sin temor a equivoco, los más populares de la radio nacional.
A más de la profesionalidad y el carisma de sus productores, eran programas con cierto corte humorístico, con secciones de un personaje, generalmente femenino con una lengua de trueno, pero con mucha gracia para el chisme farandulero.
También, existían otros espacios en la radio todos con muy buena audiencia producto de las informaciones de artes, importantes entrevistas, y los chismes sobre los artistas espinita que tanto gusta a los dominicanos.
“La Farándula en Santo Domingo” de don Guillermo Henríquez Hijo, “Panorama Farandulero y algo Más” de Carlos T. Martínez, “Club Soda” de don Francisco Alvarez Castellanos, “Aquí Santo Domingo”, J. Eduardo Martínez y Estuardo Arias, “Articosas” de Napoleón Beras entre muchos otros.
Historia
La crónica de arte tiene su historia y en ella muchos nombres que hicieron camino en la misma, que prestigiaron esa labor y que a la vez fueron los pioneros de lo que hoy se conoce como la crónica del mundo del espectáculos.
De acuerdo a la periodista Angela Ovalle, una de las pioneras en este quehacer el primer cronista de arte del país fue Reynaldo Atanay, quien escribía para la revista Espectáculo en 1945.
Más adelante aparecen nombres como Víctor Melo Báez y su columna en el Listin Diario, José Jiménez Belén, el poeta, productor del programa “Arriba el Telón” junto a Emely Tueni y difundido por Radio Clarin; “Farándula Dominicana” producido por Jesús Rivera a través de Radio Radio y Arte y Espectáculo” con Miguel Hernández por Radio Ahora.
El programa Farándula Dominicana estaba integrado por Jesús Rivera, Angela Ovalle, Alberto Tamarez, Pedro Medrano Hinojosa, este último, luego sería presidente de la Asociación de Músicos Cantantes, Bailarines (AMUCABA).
El programa Arte Nacional en radio de Joseph Cáceres fue ciertamente la catedral de los espacios de arte en la radio dominicana, dirigido y conducido por Joseph Cáceres contaba con un elenco fuera de serie cada uno en sus respectivos roles.
Con un elenco fuera de serie, del talento de Juan Carlos Pichardo, genial en lo segmentos de humor con caracterizaciones de los principales políticos del patio a la sazón el doctor Joaquín Balaguer, José Francisco Peña Gómez, Jacobo Majluta, el profesor Juan Bosch, Rafael –Fello- Suberví entre otros, que disfrutaron hasta ellos mismos.
El comediante Héctor Sierra tuvo su momento en Arte Nacional, lo mismo que Orlando Flores, que con caracterizaciones del Pastor Alemán se convirtió en todo un fenómeno, papel que incluso también llevó a la televisión.
Estrella Piantini, Belkis Herasme (La Gata), Belkis Martínez y Rebeca Peláez, estas dos últimas interpretaron a Madam Sagá, las voces femeninas del programa, fueron figuras estelares del mismo. Félix Vicio Lora, dueño de un segmento de comentarios concisos y precisos, se convirtió en el digno conductor del programa en ausencia de Cáceres de una forma singular y atinada.
Arte Nacional en Radio tenía corresponsales en Santiago y en Bonao respectivamente, Meraldo Ovalle, Atahualpa Ramírez, Frey Núñez, Joseph Tavárez y Santiago Pito Acevedo, que diariamente daban a conocer lo que ocurría en el mundo del espectáculo en la región del Cibao.
A los estudios de Radio Central, quizás la planta donde permaneció por más tiempo, acudían casi todos los artistas que visitaban el país, algo de mucho significado para los seguidores del mismo.
