La mexicana Verónica Cruz Sánchez y la brasileña Arielle Franco fueron destacadas por “su impacto significativo” en sus comunidades, "desde el activismo y el gobierno hasta los deportes y las artes".
Dos latinoamericanas fueron reconocidas como Mujeres del Año por la famosa revista Time, un listado que comparten con otras 10 personalidades del mundo en una edición que, pese a que se repite todos los años, es particularmente especial porque coincide con la celebración de los 100 años de la publicación.
En esta oportunidad, la activista mexicana Verónica Cruz Sánchez, defensora de la justicia social y el derecho de las mujeres al aborto, y la ministra brasileña de Igualdad Racial, Anielle Franco, fueron destacadas por su "impacto significativo" en sus comunidades, "desde el activismo y el gobierno hasta los deportes y las artes".
“Durante los últimos 18 meses, Cruz, una mujer de 52 años pragmática y de habla rápida -que ha hecho campaña para organizaciones de justicia social desde que era una adolescente-, ha expandido Las Libres a EEUU”. Así describe la revista Time parte del trabajo reciente de la mexicana Verónica Cruz.
Pero su labor data del año 2000, cuando empezó a liderar el grupo feminista Las Libres, en su país natal, en una cruzada contra la descriminalización del aborto y en defensa de las mujeres para que tengan acceso a un aborto seguro.
Su foco inicial fue el estado de Guanajuato, una localidad profundamente conservadora que había criminalizado esta práctica en casi todas las circunstancias. En tal sentido, “Cruz y sus colegas han trabajado para distribuir una píldora aprobada por la Organización Mundial de la Salud (OMS) y en ayudar a las mujeres a sentirse seguras”, se lee en la publicación.
Tras el éxito local y después de haber logrado abarcar otros estados, su apuesta cruzó fronteras. “En Estados Unidos, las mujeres que vemos están aterrorizadas”, ha dicho Cruz en entrevistas. “Tienen muy poco conocimiento sobre las píldoras”.
Así, Las Libres se ha expandido a Estados Unidos en el último año y medio después que la legislatura de Texas aprobó una prohibición casi total del aborto en mayo de 2021. A la fecha, la organización ya cuenta con alrededor de 300 voluntarios en ese país y han ayudado a unas 1.000 mujeres.
En 2006 Cruz recibió el premio Defensora de los Derechos Humanos de Human Rights Watch, por su trabajo de defensa de los derechos sexuales y reproductivos, particularmente, el acceso al aborto de las mujeres en Guanajuato.
Cruz Sánchez nació en la ciudad de León, Guanajuato, el 1 de febrero de 1971 para ser la cuarta de ocho hijos (cinco mujeres y tres hombres).
Desde que estaba en secundaria comenzó a trabajar con las mujeres de su colonia, yendo de casa en casa a enseñarles a leer y escribir; ahí, se dio cuenta de que el trabajo y activismo social eran las áreas en las que quería desempeñarse.
Así, se hizo trabajadora social por la Escuela de Trabajo Social José Cardijn de León y en el año 2000, a la par de la fundación de Las Libres, cursó una licenciatura en Comercio Internacional.
Por su parte, Anielle Franco logró notoriedad este año tras convertirse en ministra de la Igualdad Racial en Brasil con la llegada de Luiz Inácio Lula da Silva al poder.
Franco, quien “nunca planeó ser política, porque era cosa de su hermana”, se internó en el mundo del activismo luego de que su hermana, Marielle, cinco años mayor que ella, fuera asesinada cuando ocupaba un cargo en el concejo municipal de Rio de Janeiro.
Marielle era, en ese entonces, “apasionada, decidida y activista nata” de los derechos de la comunicado afroamericana y de la comunidad LGBT. “Yo era más tímida”, cuenta Anielle a Time.
Cercanos a las hermanas creen que el asesinato fue “en represalia por su activismo contra la violencia policial, el racismo y la corrupción”.
“La búsqueda de justicia puso a Anielle, entonces de 33 años, en el centro de atención nacional. Jugadora de voleibol competitiva y profesora de inglés, se dedicó al activismo a tiempo completo y lanzó una organización sin fines de lucro en nombre de su hermana, en un momento en que el presidente de extrema derecha Jair Bolsonaro, elegido a fines de 2018, estaba golpeando la agenda de derechos humanos”, relata la revista.
Y añade que “su trágica historia familiar, su personalidad calurosa y un hábil uso de las redes sociales transformaron a la tímida Anielle en una líder improbable del movimiento por los derechos de los negros” en ese país.
Los brasileños de raza negra representan casi el 60% de los 214 millones de habitantes del país, pero Anielle se enfrenta a disparidades raciales profundamente arraigadas. El ingreso familiar per cápita promedio de los brasileños blancos es casi el doble que el de los de raza negra, según las estadísticas oficiales consignadas en una publicación reciente del Financial Times.
Este grupo demográfico sólo ocupaba el año pasado alrededor del 5% de los puestos ejecutivos y el 6,5% de los puestos en juntas directivas y dirección de grandes empresas, según el índice de equidad racial del país de 2002. En la última década, esta representación ha mejorado apenas marginalmente.
"En Brasil, el racismo es enorme. No es sólo institucional", dijo al medio británico Anielle.
Hoy, con 38 años –la edad que tenía su hermana al morir- Franco lidera la lucha por un Brasil más justo. “Estoy muy feliz y no llego sola, ese reconocimiento no es sólo mío, es de todas las mujeres negras de Brasil”, expresó la ministra al verse entre el grupo de 12 personalidades reconocidas.
Además de las latinoamericanas, en el listado se encuentran la actriz australiana Cate Blanchett; la paquistaní Ayisha Siddiqa, activista sobre los efectos del cambio climático; la actriz estadounidense Angela Bassett; la boxeadora profesional somalí Ramla Ali; la cantautora estadounidense Phoebe Bridgers; la activista ucraniana por los derechos de la comunidad LGBT Olena Shevchenko; la disidente iraní Masih Alinejad; la futbolista estadounidense Megan Rapinoe; la japonesa Makiko Ono, ejecutiva de la empresa Suntory; y la escritora estadounidense Quinta Brunson.
Muchas de las mujeres en la lista "han enfrentado inmensos desafíos que las inspiraron a impulsar el cambio", indica la revista.