Shell Brasil presentó este miércoles una solicitud de medida cautelar, junto con otras cuatro grandes empresas del sector petrolero, contra la recaudación del impuesto a la exportación de crudo.
El impuesto fue anunciado por el ministro Fernando Haddad la semana pasada. El gobierno instituyó, a través de la medida provisional el cobro de un impuesto del 9,2% a las exportaciones de crudo de marzo a junio, para ayudar a compensar la caída en los ingresos por exenciones de combustibles.
En un comunicado, Shell dijo que "ve la noticia con preocupación" y dijo que el impuesto tendrá un efecto financiero para la empresa en el país. “La medida, que fue anunciada sin un diálogo significativo con la industria, genera incertidumbre sobre nuevas decisiones de inversión, afectando la competitividad de Brasil en el sector de exploración y producción, en el que Brasil tiene un fuerte potencial geológico”, dice.
La empresa recuerda que el Congreso puede interrumpir la vigencia de la recaudación del impuesto o renovarla más allá de los cuatro meses inicialmente previstos. “Por lo tanto, todavía es demasiado pronto para especular sobre sus posibles impactos”, dice la empresa.