Madrid (EFE).- Un total de 2,46 millones de electores habían depositado su voto en las oficinas de correos hasta las doce de la noche del jueves, lo que representa el 93,8 por ciento de las solicitudes, a la espera de contabilizar el voto postal que todavía puede entregarse hasta las 14,00 horas de hoy, cuando finaliza el plazo.
En un comunicado, Correos incide en que a la espera de los datos definitivos, este número de votos por correo representa ya la cifra más alta de voto postal registrada en la historia de la democracia española, lo que “demuestra el éxito en la gestión del voto por correo”.
No obstante, el número de documentaciones electorales que continuaban sin recoger por los ciudadanos a la apertura de las oficinas, era de 123.822.
El número total de solicitudes asciende a 2,62 millones de peticiones, por lo que hasta media noche de ayer quedaban por emitir 161.524 votos.
Por otra parte, el porcentaje de votos emitidos, que representa el 93,8 % de los solicitados supone el ratio más alto alcanzado en unas elecciones generales desde 2008, el primer año con registros estadísticos homologados, mientras que también supera el récord que se marcó en 2016, cuando se emitieron 1,35 millones de votos postales.
Frente a las últimas elecciones generales de noviembre de 2019, cuando 924.403 electores emitieron su voto por vía postal, el incremento ha sido de casi el triple, del 166 %.
Con los datos actuales, todavía quedaría por emitir cerca del 6 % de los votos solicitados, aunque este porcentaje está muy por debajo del que se quedó pendiente en anteriores elecciones que asciende a una media del 7,3 %.
Ante las dudas sobre este procedimiento que han generado algunas formaciones como el PP o Vox, Correos ha reiterado este viernes que ha realizado más de 21.00 contratos de refuerzos y ha puesto “todos los recursos organizativos, tecnológicos, logísticos y humanos necesarios” para garantizar el cumplimiento de sus obligaciones como servicio público.
Algunas de las medidas desplegadas en los últimos días, toda vez que la Junta Electoral ha considerado también su petición de prorrogar el plazo para poder votar hasta hoy a las dos de la tarde, han sido la apertura extraordinaria de oficinas los fines de semana, la ampliación de horarios hasta las diez de la noche o los repartos extraordinarios de envíos electorales.
Para la jornada electoral del 23 de julio, Correos enviará todos los votos emitidos a las mesas electorales y para ello establecerá un despliegue logístico especial, integrado por más de 14.000 profesionales, entre personal de reparto, oficinas y centros de tratamiento, y movilizará todos los vehículos de su flota que sean necesarios para el correcto desarrollo de su misión.
Cuando se abran los locales electorales, un primer equipo entregará los votos en custodia en las 60.314 mesas electorales distribuidas en los 22.562 locales electorales de los 8.131 municipios de España.
Otro grupo de empleados hará llegar a las mesas aquellos votos por correo que pudieran recibirse durante el transcurso de la jornada y finalmente un último equipo recogerá el denominado “tercer sobre”, con el resultado final del escrutinio, de las mesas electorales de todos y cada uno de los colegios electorales del país.
Cataluña, Baleares, Comunidad Valenciana y Murcia son las autonomías con menor voto por correo emitido en relación con su población, mientras que País Vasco y Madrid alcanzan las mayores cotas.
Los votos por correo emitidos hasta el momento en todo el país son 2.461.284, una cifra que no se reparte de modo uniforme en las diferentes comunidades autónomas, que muestran diferencias entre sí que van más allá de lo esperable en función de su población.
Así, cabe reseñar que mientras que la población de la Comunidad de Madrid representa el 14 % del total español; y la del País Vasco, el 5 %, el porcentaje sobre del voto por correo registrado en ambas está muy por encima del esperable en función de ese primer dato: es del 24 % en Madrid y del 10 % en el País Vasco.
Por el contrario, la población catalana representa algo más del 16 % del total nacional, mientras que los ciudadanos de esa autonomía que, a las 12 de la noche de ayer, habían enviado su voto por correo para las Elecciones Generales del domingo está en torno al 10 % del global.
Algo parecido ha sucedido en la Comunidad Valenciana. Su población representa más del 10% del total nacional, mientras que los valencianos que han votado por correo representan el 6,8% del total. Lo mismo ha ocurrido en Baleares (con cifras respectivas de 2,5 % y 1,4 %) o en Murcia (3,2 % y 1,9 %).
En suma, cabe decir que ha habido una menor participación en el voto por correo en comunidades de la costa mediterránea, y mayor e Madrid y País Vasco, mientras que la gran mayoría, incluida Andalucía, muestra cifras más aproximadas entre su porcentaje de población sobre el total de españoles y los que han votado por correo.