España.– La Policía Nacional, en una operación conjunta con con funcionarios de Vigilancia Aduanera de la Agencia Tributaria, se ha incautado en el Puerto de Algeciras (Cádiz) de un total de 9.436 kilos de cocaína, en lo que supone un golpe “histórico” al narcotráfico en España al ser la intervención del mayor alijo de cocaína en territorio español.
La droga incautada se ha producido dentro de la llamada operación Nano, iniciada a mediados del mes de julio, al tenerse conocimiento de una organización criminal que pretendería introducir esta droga en el país. Fue hallada este pasado miércoles en un contenedor refrigerado procedente de Ecuador que decía contener 1.080 cajas de bananas, así lo han explicado los responsables del operativo en una rueda de prensa celebrada este viernes 25 de agosto.
Este golpe supera al último gran alijo de cocaína interceptada también en Algeciras en 2018, cuando se aprehendieron un total de 8.740 kilos de esta droga en un contenedor de plátanos procedente de Colombia.
La Agencia Tributaria en un comunicado ha asegurado que “en el cargamento ilícito se detectaron más de 30 logotipos diferentes, los cuales se corresponden con las diferentes organizaciones criminales europeas receptoras del alijo. La organización criminal responsable del suministro de cocaína a las redes más poderosas de Europa contaba con un amplio entramado empresarial, para el envío de contenedores marítimos desde Ecuador hacia España”
Las primeras investigaciones comenzaron en julio, cuando los agentes tuvieron conocimiento de la existencia de una organización criminal responsable de suministrar cocaína desde Sudamérica hasta Europa. Los investigadores detectaron que el entramado disponía de una amplia red empresarial para el envío de la droga desde Ecuador hasta nuestro país a través de diferentes puertos españoles, principalmente Algeciras y Vigo.
Los investigadores han comprobado que la organización operaba a través de una empresa dedicada al comercio internacional de bananas ubicada en Machala (Ecuador), y desde allí enviaban la mercancía en contenedores marítimos a diferentes empresas españolas controladas por miembros de la red criminal. Después de semanas de investigación, las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado han podido acreditar “la gran capacidad logística del entramado”, expresa la Agencia Tributaria, capaz de enviar 40 contenedores mensuales hacia Europa, descubriendo que algunos de ellos eran contaminados con la sustancia estupefaciente.