Estados Unidos, que se adueñó del mundo tras el colapso de la URSS, se enfrenta ahora a una nueva realidad: Rusia y China acumularon fuerzas, formaron los BRICS y desafiaron la unipolaridad estadounidense, rebatiendo la tesis de Francis Fukuyama sobre la inmutabilidad del liberalismo occidental, afirman medios sauditas.
Tras la caída del muro de Berlín en noviembre de 1989 y el fin de la Guerra Fría, surgió un mundo unipolar liderado por EEUU, y uno de los exponentes de ese nuevo orden liberal occidental es Fukuyama, autor, politólogo y filósofo estadounidense de ascendencia japonesa, destaca el periódico Asharq Al-Awsat.En su libro El fin de la historia y el último hombre, Fukuyama propaga un único mensaje: el mundo está ahora bajo el control de los liberales liderados por Estados Unidos, mientras que el socialismo, el nacionalismo o la religión ya no podrán oponerse a ello.
El planeta se movilizó en torno a esa idea, que entonces parecía "brillante e insólita", señala el periódico árabe. Su profecía se hizo realidad en las primeras etapas de la formación de un mundo unipolar, con los Estados Unidos convirtiéndose en un país hegemónico.De esta manera, el sueño estadounidense de un mundo unipolar pasó a ser una realidad: Washington estaba en la cima de su poder económico, dictando sus condiciones, consolidando su influencia en la economía mundial y adoptando incluso una visión neoconservadora basada en la idea de un siglo estadounidense.
El BRICS, informa la fuente saudí, "representa el 40% de la población mundial y cerca del 26% del producto interno bruto mundial y se ha convertido en un sueño que abarca un país tras otro".Por ejemplo, los cinco Estados miembros (Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica) abrieron las puertas del BRICS a 22 nuevos países, seis de los cuales se incorporarán en 2024.
La carrera hacia nuevos horizontes está impulsada por los sucesivos cambios políticos mundiales, las consecuencias del conflicto entre Rusia y Ucrania y la pandemia del COVID-19, así como de la crisis económica mundial.