HAITI.- El reclamo de las salida del primer ministro de facto haitiano Ariel Henry ocupó la atención de representantes la diáspora del país caribeño en Europa, África y América, en una reunión celebrada en Canadá.
Seleccionado para el cargo por el entonces presidente Jovenel Moïse dos días antes de ser asesinado en su residencia el 7 de julio de 2021, Henry fue definido por la diáspora de su país como “una marioneta al servicio de un sector de la comunidad internacional que es responsable de la grave crisis que sacude a Haití”.
El reclamo de alrededor de un centenar de líderes reunidos en la Universidad de Quebec en Montreal (UQUAM) también fue formulado por varias decenas de organizaciones profesionales, religiosas y políticas en sendos documentos distintos enviados por separado a la Unión Africana y a Rusia para solicitarles que en el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas sea bloqueado el proyecto de intervención militar y que, a la vez, persuadan a Kenia en sus pretensiones de encabezar esa misión.
“El fin del indecente apoyo internacional, en particular EE.UU., Canadá y Francia, al gobierno criminal del PHTK de Ariel Henry y el establecimiento de un gobierno de transición creíble”, reclamaron los líderes haitianos a la Unión Africana en una comunicación que le remitieron hacen dos semanas.
Desde varios países
La actividad realizada por la diáspora haitiana en la Universidad de Quebec en Montreal (UQUAM), Canadá, fue organizado a través de un comité interinstitucional cuyo portavoz fue Samuel Colin, un líder comunitario en la capital de Francia, Paris.El comité organizador lo integraron miembros del Foro Haitiano para la Paz y el Desarrollo Sostenible, el Centro Jean-Paul-Lemay, el Foro Económico Internacional Negro, la Maison d’Haïti, Konbit for Haiti y el Frente Unido de la Diáspora Haitiana.
Participaron líderes de la diáspora haitiana de Canadá, Estados Unidos, Francia, Jamaica, Inglaterra y República Dominicana.
Algunas voces
Jean Marie Theodat y Jacky Lumarque: El profesor Lumarque, rector de la Universidad Quisqueya y el geòologoTheodat coincidieron en señalar la ausencia de liderazgo gubernamental, “lo cual ha permitido con la tolerancia de la comunidad internacional, la influencia sin precedentes de las bandas armadas “al servicio de actores económicos y políticos”.
Lumarque, que rechaza de plano una intervención militar en Haití, entiende que la ayuda que pueda ofrecer la comunidad internacional depende en gran parte de la buena gobernanza o del liderazgo local, lo cual “hoy no tenemos”.El académico reconoce que en su país existe una situación compleja en cuanto a remover del poder al equipo actual, que cuenta con el apoyo de la comunidad internacional y las bandas armadas a su servicio.
De acuerdo con el profesor Thedot, la capital haitiana, Puerto Príncipe, se ha convertido en un infierno, se muestra favorable a una gran movilización popular parecida al movimiento “bwa kale” (justicia expeditiva contra los pandilleros), pero que el prefiera llamar “je kale” (ojos abiertos) para evitar el sexismo antifeminista que en el fondo se expresa en el primer término.
Manifestó que los enemigos de Haití son conocidos, al igual que sus amigos. Entre estos últimos favoreció una presencia más activa de Cuba en la actual coyuntura haitiana.
Paul Arcelin: Igualmente participaron altos exfuncionarios como el antiguo embajador de Haití en República Dominicana, Paul Arcelin, quien rechaza la invasión militar internacional. También reclamó la renuncia de Ariel Henry.
Ginette Cherubin: Ginette Cherubin, exministra de la mujer y miembro del Consejo Electoral Provisional haitiano, también rechazó la intervención armada en su país y la salida de Henry. Cherubin en su momento denunció el fraude electoral del 2010 que llevo al poder al Partido haitiano Tet kale (caco pela’o) de Michel Martelly. Actualmente es una figura prominente del Acuerdo Montana, que reúne a más de 1,000 firmantes para una solución haitiana a la crisis.
Edwin Paraison: En un panel en el que tuvo una intervención conjunta a Colette Lespinasse, el sacerdote anglicano y ex ministro de los Haitianos que Residen en el Exterior abordó el impacto migratorio de la crisis haitiana.
Paraison señaló que República Dominicana es el principal receptor de los haitianos que huyen de la inseguridad y la violencia creadaa por las bandas armadas. “Toda vez que la situación en Venezuela ha generado muchas más migrantes y refugiados, una cantidad estimada en más de 6.3 millones en América Latina y el Caribe, “es evidente que por razones geopolíticas hay un trato diferente hacia estos últimos que hacia los haitianos”.
Marjorie Villefranche: Una de las organizaciones más emblemáticas de la comunidad haitiana de Canadá, “Maison d’Haiti”, a través de su directora Marjorie Villefranche, favoreció un modo de envolvimiento de la diáspora haitiana, “que sea de acompañamiento a la lucha que se realiza en el terreno, la cual actualmente indica que “las cosas no van bien”.
Valerie Plante: La alcadesa de la ciudad de Montreal, Valerie Plante, igualmente participóo en el evento para subrayar que la comunidad haitiana es la más numerosa de los colectivos de migrantes en esa ciudad canadiense, la cual “está presente en todas las esferas de la vida de la ciudad”.De hecho, envió a una representante, Daphney Colin, quien es una canado-haitiana presidenta de la comisión de seguridad pública de Montreal.
A su manera de ver, no puede haber mejoría en Haiti sin la salida de Ariel Henry y el desmantelamiento de las gangas.