PUERTO PRINCIPE, HAITI. -La Iglesia católica rompe su silencio y señala con el dedo al gobierno que no hace prácticamente nada para proteger a la población contra la furia de las bandas armadas.
“Exigimos que las autoridades públicas y otros sectores de la nación cesen al mismo tiempo en su complicidad y apoyo a las bandas armadas, que la policía se convierta en aliada de la población, que el diálogo político-social se construya sobre la base de las necesidades reales de la gente.
Las bandas armadas que aterrorizan a la población y paralizan las actividades en el país, particularmente en Puerto Príncipe, cuentan con el apoyo de "las autoridades públicas y otros sectores de la nación", acusó la Conferencia Episcopal de Haití (CEH) en una posición adoptada.
La Iglesia católica denuncia la “inacción y el silencio cómplice del gobierno” ante el terror de las bandas armadas.