Santo Domingo RD .- Doña Ligia Minaya Belliard, nació en Moca el 11 de enero 1941 fue narradora, periodista, fiscal, juez, profesora universitaria en el departamento de Estudios Criminales de la Pontificia Universidad Católica Madre y Maestra de Santo Domingo, en donde más tarde pasó a ser directora de dicho departamento.
Además de ser comunicadora académica que participó en seminarios, conferencias y diferentes ferias internacionales del libro, Ligia fue una figura pública por su papel de periodista activista que criticaba las injusticias de su tiempo y por ser una escritora pionera que fue galardonada con el Premio Nacional de Cuentos del país en el año 2000 con su libro «El Callejón de la flores».
Su carrera literaria comenzó como columnista en los años 80, cuando empezó a escribir para el periódico vespertino Última Hora conjuntamente con relatos para la revista femenina Mujer Única en Santo Domingo.
Como resultado de esta actividad periodística (18 años en Última Hora y dos años en Diario Libre) salió su libro Palabras de Mujer (1997), una compilación de sus artículos.
Vivió en Denver durante un tiempo, junto a su hijo y nieto.
Sus primeros relatos aparecieron en el concurso de cuentos de Casa de Teatro en 1995 («No lo hice por maldad») y en 1997 («El fuego sagrado del hogar»), los cuales recibieron una mención de honor.
En 1998 fue galardonada con el Primer y Segundo premio por «Un abuelo impropio» y «Llanto de cactus en la noche interminable», en 1999 publicó «El Callejón de la flores», una colección de 12 cuentos eróticos.
ObrasPublicó Palabras de Mujer (1997), El Callejón de las Flores (1999,2004,2011), Cuando me asalta el recuerdo de ti (2003), Mi Corazón tiembla en la sombra (2007), Mujeres de vida alegre (2009), Cartas desde Denver (2010), Si Cayese la Ausencia (2011, 2014), Mariposa de arena (2012), Cartas a mi nieto (2013).Aparte de su éxito nacional en los círculos literarios, recibió una marcada atención internacional.
Amante de su pueblo natal, Moca, prácticamente sus últimos años vivió allá, aquejada de fibromialgia, terrible enfermedad que minó todas sus fuerzas e hizo que sus últimos años fuesen muy difíciles, cayendo en una terrible depresión.
Fue encontrada en mal estado por ingestión de algún tipo de fármaco, por una sobrina y llevada al Centro Médico Guadalupe, de Moca, donde falleció un 6 de octubre del 2018.