Dajabón.-Sorpresa causó la mañana de este martes el encadenamiento en frente del edificio que aloja la gobernación de esta provincia de un comerciante para demandar que el Cuerpo Especializado en Seguridad Fronteriza Terrestre (Cesfront) le devuelva un vehículo retenido y la mercancía que llevaba en él.
Miguel Pérez Fortuna, se ató una cadena al cuello y se encadenó con varios candados en las columnas del edificio que aloja la gobernación, alegando que necesita su vehículo para sobrevivir, porque se dedicó a la venta callejera después que se cerró la frontera.
Relató que ha tenido que hacer una ruta para vender a dueños de colmados de Restauración, Hipólito Billini, Capotillo y otras zonas aledañas para evitar pedidas económicas, debido a que el mercado de Dajabón no está funcionando.
Dijo que la mercancía retenida tiene un valor superior a los 200 mil pesos y que le fue retenido su vehículo por miembros del Cesfront que consideraron que estaba traficando mercancía a los haitianos.