La iglesia católica manifestó preocupación ante la ola de violencia generalizada que impacta a todos los estratos y entes sociales, por lo que demandó del Gobierno políticas públicas orientadas hacia una mayor inclusión del segmento poblacional más desposeído.
El creciente clima de violencia que afecta a República Dominicana se cierne sobre los hogares, las escuelas, los barrios, las vías públicas y otros escenarios a nivel nacional, situación que al igual que a otras organizaciones preocupa a la iglesia católica.
En medio de su preocupación por la violencia, atribuida en gran medida a la descomposición familiar, al abandono de los valores, los principios y en especial de Dios, la Arquidiócesis de Santo Domingo pidió al Gobierno diseñar planes y programas que brinden a los jóvenes amores oportunidades de estudio y trabajo y los aleje de la delincuencia.
En ese sentido, llama también a la juventud a ser luz en medio de este clima desfavorable, afirmando que cuando el hombre se aleja de Dios se deshumaniza y se hace vulnerable a cometer acciones infringen las leyes.
Bajo el lema "Jovenes llamados a ser fuente de Luz" la Arquidiocesis convocó a la Semana Vocacional, orientada a ayudar a los jóvenes a descubrir sus vocaciones religiosas.
Desde el 5 y hasta el 12 de noviembre la iglesia estará realizando diversas actividades espirituales, de oración, reflexión, pero también de diversión a fin de acercar a la población a su propósito para con Dios.