Revelan acoso sexual en PNH a viudas de policías haitianos muertos en servicio

Una viuda afligida acudió a la dirección general de la Policía Nacional Haitiana (PNH) en 2006. Acababa de perder a su marido, un policía, y estaba tomando medidas para recibir su subsidio salarial. Al llegar a la institución es recibida por el jefe del servicio médico-social en su despacho. Este último se acerca a él, lo agarra con fuerza y ​​eyacula en sus pantalones.

Esta triste historia, relatada por una asociación que ayuda a las viudas de los agentes de policía, se parece a la experiencia vivida por Micheline. Cuando su marido, policía de Cité-Soleil, murió en 2005, recuerda la insistencia del mencionado empleado y su negativa a avanzar en su caso si ella no se acostaba con él. “Tuve que pasar nueve meses sin recibir ni un céntimo porque él era muy influyente en el sistema”, lamenta Micheline.

Hoy, una mujer reemplazó a este empleado. Pero el acoso sexual que sufren las compañeras de los policías muertos persiste en casi todos los niveles. “Algunos agentes sin escrúpulos se aprovechan de las viudas que no saben a quién contactar”, revela Chantal Bouquet, presidenta de la Unión Nacional de Familiares de Víctimas de la Policía (UNAFPOVIP).

El asunto crea una profunda inquietud. Foto: Samuel Céliné / Ayibopost

La vergüenza de las víctimas

El asunto crea una profunda inquietud. “Sispann koupe madanm polisye ki mouri yo”, se lee en una pared de la avenida Panamericana en Pétion-ville. Luc, un agente de unos cincuenta años, destinado en una comisaría de la región metropolitana, afirma haber conocido a varias víctimas femeninas, sin saber qué camino tomar. “Algunos ceden y otros resisten el riesgo de que sus expedientes sean arrastrados”, dijo el hombre.

“A veces”, continúa Luc, “la vergüenza de haber sido objeto de un trato tan degradante impide a la viuda contar claramente lo que sufrió, pero la expresión de su rostro indica que fue solicitada sexualmente. » Al resistirse a los avances, la mayoría de las víctimas se ven obligadas a mendigar, añade Wilson, otro policía.

Contactado por teléfono, el portavoz de la PNH, Michel-Ange Louis Jeune, dijo que no estaba al tanto de esta práctica. “Me acaba de informar de esto”, explica el comisario, que exige documentos a “fuentes oficiales sobre el tema”.

24 horas después de recibir dos informes elaborados por la Red Nacional de Defensa de los Derechos Humanos en 2016 y por la Fundación “Je Klere” en 2020, el comisario promete reaccionar en siete días. Este artículo se actualizará si responde preguntas.

“ Sexo por cheques ”  

“Se está chantajeando a las esposas de los policías asesinados en el ejercicio de su deber para obtener el cheque destinado a los padres del policía asesinado”, se lee en el reciente informe de la Fundación Je Klere. “A veces son víctimas de violación, agresión sexual y/o acoso”.

En la denuncia de la RNDDH, se informó incluso que para varias de estas mujeres el trato estaba claramente expresado: "  sexo a cambio de cheques  ", menciona Marie Rosie Auguste, quien precisa que las víctimas mencionadas en el informe se acercaron a la organización entre 2015 y 2016.

Además de una política clara contra el acoso, se está organizando resistencia dentro de la PNH. Hoy, la Unión de Familiares de Víctimas de la Policía intenta orientar a las viudas sobre los pasos a seguir sin pasar por una tercera persona, a través de un grupo de WhatsApp, informa Chantal Bouquet.

Pero falta un deseo claro por parte de la jerarquía de combatir estas prácticas que socavan los derechos de las viudas. “A mi marido lo mataron en 2014”, testifica Lourdia. Cuando tuve que hacer los trámites para obtener el subsidio salarial, todos sus amigos policías me advirtieron contra esta práctica. Me pidieron que tomara precauciones para no ser atrapado”.