Madrid.-Tras el registro de la ley de amnistía en el Congreso de los Diputados, el PP y Vox toman la delantera para enfrascarse en una ofensiva a través de varias vías: la parlamentaria, la judicial, la europea e internacional y la de la calle.
Este martes, el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, se ha reunido con una treintena de corresponsales extranjeros —The Guardian, Financial Times oLe Monde— con el fin de denunciar los acuerdos de Pedro Sánchez con los independentistas, entre ellos, la amnistía.
Por su parte, el líder del Vox, Santiago Abascal, ha cumplido con sus amenazas, y se ha presentado ante el Tribunal Supremo para querellarse contra Pedro Sánchez.
Además, ha aseverado que hará lo propio con los miembros de las Mesas del Congreso y el Senado si admiten a trámite la norma, independientemente de que el PP presida la de la Cámara Baja.
Asimismo, ha solicitado la suspensión cautelar del pleno de investidura de Pedro Sánchez, que comienza este miércoles en el Congreso, alegando que hay “alarma social” y “urgencia” para la pervivencia del ordenamiento jurídico.
De momento, Abascal se ha querellado contra Sánchez por los siguientes delitos: cohecho, colaboración con el terrorismo, usurpación de funciones del Poder Judicial y negociaciones prohibidas a los funcionarios públicos en el ejercicio de su función. Vox incluye a Carles Puigdemont en la querella y, en relación con el delito de cohecho, pide la responsabilidad penal tanto para el PSOE como para Junts. Además, de en la Constitución, Vox también se ampara en normativa europea, pese a que su programa es contrario a los intereses políticos de España en la UE. En concreto, señala que Sánchez comete una serie de actos que atentan directa y definitivamente con la “máxima gravedad la cláusula del Estado de Derecho”, según el artículo 2 del Tratado de la Unión Europea.
“La mayoría parlamentaria no convierte en legal lo delictivo, igual que no convierte la mentira en verdad o el mal en bien”, justifica la extrema derecha en un comunicado, a lo que Abascal, en declaraciones a los medios, ha añadido que el “periodo trágico” en la historia de España se puede evitar.
También ha alentado a las protestas en Ferraz, porque, a su juicio, el Gobierno que salga de la sesión de investidura de Sánchez no será legal, ni legítimo para Vox. “Pensamos que este golpe se puede detener”, ha asegurado Abascal.