El hogar es el lugar más peligroso para las mujeres y las niñas, según la ONU

Una mujer de 39 años es la víctima número 52 de violencia de género en España este año

NUEVA YORK.– El hogar es el lugar más peligroso para las mujeres y las niñas, según un estudio elaborado por la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (ONUDD) y la Entidad de la ONU para la Igualdad de Género y el Empoderamiento de la Mujer, que se publicó este miércoles.

El texto indica que cerca de 89.000 mujeres y niñas fueron asesinadas de manera intencionada a lo largo de 2022 en todo el mundo, lo que supone la mayor cifra anual de homicidios femeninos por razones de género registrada en las últimas dos décadas.

Concretamente, el 55 % de estos asesinatos fueron cometidos por miembros de la familia o parejas sentimentales, lo que —señala el documento— subraya la "inquietante realidad" de que el hogar dista mucho de ser un refugio seguro para las mujeres y las niñas. En contraposición, solo el 12 % de los homicidios de varones se perpetran en casa.

"Alarmante número"

"El alarmante número de feminicidios es un duro recordatorio de que la humanidad sigue enfrentándose a desigualdades profundamente arraigadas y a la violencia contra las mujeres y las niñas", declaró Ghada Waly, directora ejecutiva de la ONUDD.

Asimismo, indicó que cada vida que se pierde es un llamamiento a abordar urgentemente las desigualdades estructurales, a mejorar las respuestas de la justicia penal, para que ninguna mujer o niña tema por su vida a causa de su género.

"Los Gobiernos deben invertir en instituciones más inclusivas y bien equipadas para poner fin a la impunidad, reforzar la prevención y ayudar a las víctimas, desde el personal de primera línea hasta la judicatura, para terminar con la violencia antes de que sea demasiado tarde".

El informe asegura que las mujeres y niñas de todas las partes del mundo sufren la violencia de género. En este sentido, detalla que, por primera vez desde que empezaron a publicar las estimaciones regionales en 2013, África ha superado a Asia como la región con un mayor número de víctimas totales, alcanzando los 20.000 casos.