Scot England, de 58 años, debutó en el pugilismo contra Jashawn Hunter (23) y perdió antes del primer minuto
ESTADOS UNIDOS.- En Nashville, Tennessee, un insólito enfrentamiento boxístico capturó la atención de fanáticos y curiosos en lo que algunos describieron como una notable historia de perseverancia y otros, como un posible desacierto en términos de competencia deportiva. Scot England, un escocés de 58 años cuya vida había transitado lejos de los cuadriláteros, desafió a las expectativas y a su notablemente más joven oponente, Jashawn Hunter (23), en una contienda que marcó su debut y despedida en el ámbito del boxeo profesional.
La velada, celebrada en el Texas Troubadour Theatre de Nashville durante las últimas horas, no solo representó la incursión de England en el mundo del boxeo, sino su intento de convertirse en el pugilista de peso welter más veterano en actividad de la historia. Antes de su sorpresiva apuesta por el deporte de los puños, England había desarrollado su carrera como DJ de radio y reportero para WAND-TV, según reflejó el medio británico The Sun, una trayectoria que poco sugería su posterior viraje hacia los guantes y el ring.
Sin embargo, la contienda contra Hunter, quien a sus 23 años llegaba con un sólido récord de 5 victorias (5KO) y solo una derrota, se resolvió con suma rapidez. Tras un intercambio inicial en el que England logró conectar un par de jabs, su adversario tomó la delantera, esquivando un ataque directo para responder con una combinación fulminante de tres golpes que enviaron al escocés a la lona.
A pesar de la caída, England demostró tenacidad al ponerse de pie por sí mismo e intentar continuar en la contienda. No obstante, la falta de equilibrio y su inhabilidad para defenderse adecuadamente llevaron al árbitro Anthony Bryant a detener el combate apenas 46 segundos después de haber comenzado, mientras que desde la esquina de England, la toalla caía en señal de rendición.El hombre de 58 años debutó en el boxeo profesional
Este debut, que culminó en una derrota para el escocés, quedó registrado oficialmente en el mundo del boxeo. Por su parte, Jashawn Hunter elevó su historial a 6 victorias y una derrota, sumando otro nocaut a su creciente récord.
Comentarios de espectadores en las redes sociales denotaron preocupación y asombro ante la inusitada diferencia de condiciones físicas y experiencia entre los contrincantes. “Eso fue aterrador”, afirmó en redes sociales un fanático que estaba viendo el evento a través de Internet. “¡¿Dejaron que la pelea siguiera después de eso (por la la caída)?!?!? Buen señor”, preguntó otro, mientras que un tercero añadió: ¿Cómo se decidió esta pelea?”.
En este escenario, England, lejos de mostrar pesar, exhibía su característico humor en la previa al combate, reconociendo abiertamente su desventaja en edad, fuerza, velocidad, experiencia y alcance: “Es tres décadas más joven que yo, es más fuerte, es más rápido, tiene más experiencia y tiene un alcance más largo que yo”.
La afición al boxeo de England no era una novedad. Durante sus años como periodista, entabló una relación con la leyenda del pugilismo, Muhammad Ali, a quien consideraba un amigo y en cuyo honor nombró a su hija. Recordando un encuentro con Ali, England contó en una entrevista con Herald-Review: “La primera vez que entré a la sala de Ali, él me dijo: ‘¿Eres boxeador?’ Y yo dije: ‘No, campeón, no soy lo suficientemente fuerte para eso’”.
Antes de su pelea, England visitó la tumba de Ali en Louisville, Kentucky, donde le confesó a su ídolo ya fallecido su determinación por entrar en el ring profesionalmente: “Le dije: ‘Ali, esto es lo que estoy haciendo, este es mi sueño, y espero que de alguna manera puedas vigilarme mientras lo logro’”.En ese momento la mariposa más grande y colorida vino revoloteando a mi alrededor y recordé el lema de Ali: ‘Flota como una mariposa y pica como una abeja’”.
Según los registros, el boxeador más longevo en subirse a un cuadrilátero es Albert Hughes Jr., un norteamericano que en diciembre del 2019, con 70 años y 234 días, retornó al boxeo y ganó por nocaut.