Santo Domingo RD—Tras un hecho desgarrador que conmovió al pueblo dominicano donde una joven venezolana, Yenny Carolina Perez Canelon de apenas 27 años de edad, falleio a manos de un italiano de una manera bastante cruel donde cerceno su cuerpo escondiéndolo en diferentes partes de la torre donde residía en Piantini Distrito Nacional.
De un disparo que impacto su corazón en medio de una supuesta discusión, que se originó entre ambos, fue lo que desencadeno toda una noche de torturas para la joven venezolana.
Como si fue sacado de una película de terror, parte de su cuerpo fueron a parar a un refrigerador y una maleta como si pareciera que se alistaba para un viaje.
Según los informes preliminares el horrendo crimen ocurrió el 21 de diciembre alrededor de las 5 de la mañana en residencia de su agresor.
Las investigaciones que se llevaron a cabo por parte de la Policía Nacional detallaron que el agresor llego al lugar en compañía de un taxista de confianza, cargando consigo bolsas que contenían , entre otras cosas, una misteriosa bolsa de regalo.
No obstante minutos después, la víctima, Pérez Canelón, ingresó al apartamento, aparentemente para encontrarse con el agresor, pero nunca pensó que ese que sería su ultimo día.
Las cámaras de seguridad captaron el momento en que la joven llegó con un taxista que la recogería unas horas más tarde. Sin embargo, las comunicaciones entre Yenny y el taxista sugieren un cambio drástico en la situación.
Fue en ese preciso momento cuando la joven informó al conductor que su agresor quería dar una bailadita y estaba visiblemente drogado. A pesar de la espera del taxista, Yenny nunca salió del edificio.
El taxista al ver la situación que se está tornando diferentes alerto a la hermana de la joven Yeisy Carolina Quinto Canelo y al no tener respuesta de su hermana se preocupó por que lo que acude a preguntar a su agresor si había estado con la joven y alegó que no la había visto.
La joven llevaba varias horas desaparecida y su hermana notifico a la PN y fue en ese preciso momento cuando decidieron investigar el apartamento, y al momento de ingresar al ascensor se encontraron con el agresor que posteriormente se le pregunto donde estaba Yeni y el respondió que se había marchado, respuesta que no convenció al teniente.
Luego de penetrar a la residencia se encontraron rastros de sangre y, finalmente, el cuerpo descuartizado de la víctima, con la cabeza y parte de los muslos almacenados en el refrigerador.
Al parecer el agresor no llevaba mucho tiempo de haber cometido el horrendo crimen y fue detenido inmediatamente, donde confeso haber dado muerte a la joven venezolana mientras que el Ministerio Publico concluyó que el caso se trató de un asesinato premeditado.