WASHINGTON—La administración Biden planea invertir miles de millones en la fabricación nacional de grúas de carga, buscando contrarrestar los temores de que el uso de grúas construidas en China con software avanzado en muchos puertos estadounidenses represente un riesgo potencial para la seguridad nacional.
La medida es parte de un conjunto de acciones que está tomando la administración el miércoles y que tienen como objetivo mejorar la ciberseguridad marítima. Incluyen una directiva de la Guardia Costera de EE. UU. para exigir ciertos requisitos de seguridad digital para las grúas construidas en el extranjero desplegadas en puertos marítimos estratégicos, así como una orden ejecutiva del presidente Biden que establece estándares básicos de ciberseguridad para las redes informáticas que operan puertos estadounidenses.
El gobierno estadounidense invertirá más de 20 mil millones de dólares durante los próximos cinco años en la seguridad de los puertos del país, con el objetivo –entre otros– de descontinuar el uso de grúas de fabricación china. Así lo informa el "Wall Street Journal", según el cual la intervención forma parte de una serie de acciones que anunciará hoy, 21 de febrero, la administración del presidente Joe Biden para mejorar la ciberseguridad marítima.
Los gastos serán cubiertos por el paquete de infraestructuras de un billón de dólares aprobado en 2021 por Congreso de Estados Unidos.
Las nuevas grúas portuarias serán producidas por una filial estadounidense de la empresa japonesa Mitsui. La decisión de las autoridades federales surge tras una investigación publicada el año pasado por el "Wall Street Journal", que denunciaba los temores de los líderes estadounidenses sobre los riesgos de espionaje y sabotaje vinculados a la presencia en los puertos estadounidenses (algunos también utilizados por las fuerzas armadas). de un gran número de grúas gigantes fabricadas por gigantes estatales chinos.
La preocupación de Washington es que el software utilizado por las grúas podría ser manipulado por China, particularmente en caso de un conflicto en el Estrecho de Taiwán o en otro lugar. Las grúas utilizadas en los puertos estadounidenses, el 80 por ciento de las cuales son producidas por la ZPMC de China, también tienen sensores sofisticados que pueden registrar y rastrear el origen y destino de los contenedores en tránsito, permitiendo así potencialmente a Beijing obtener información sobre la recepción o el envío de material (incluido el militar) por parte de los EE.UU.
