Santo Domingo. -Dos sociedades médicas pegaron el grito al cielo por la apertura de nuevas residencias de formación de especialistas.
La Sociedad Dominicana de Urología elevó su voz por la creación de nuevas residencias médicas para formar especialistas en vías urinarias.
Entiende que no es razonable crear nuevas escuelas y aumentar el número de plazas en una especialidad médica, sin tener criterios y avales suficientes que justifiquen la necesidad de esos profesionales.
En un comunicado, la presidenta de la entidad informa que, sin tomar en cuenta la opinión de la Sociedad de Urología, se crearon nuevas plazas en los hospitales Metropolitano de Santiago (HOMS) y General Plaza de la Salud.
La doctora Katia García se mostró sorprendida por la creación de nuevas residencias con publicación del Ministerio de Salud Pública.
Expresó que para crear una nueva escuela y aumentar el número de plazas se deben realizar los estudios necesarios para identificar la demanda de profesionales en esa especialidad en el país.
“Además, es crucial contar con una planificación objetiva que permita a los egresados integrarse al sistema de salud como médicos especialistas de manera automática una vez finalizado su proceso de formación”.
Agregó que “esta situación no ha sido resuelta en el país, lo que hace que los especialistas enfrenten numerosas dificultades para obtener una plaza de trabajo en el sistema público”.
Puntualizó que, a veces, los nuevos especialistas deben esperar años o recurrir a favores políticos para ser contratados.
En el país hay cinco escuelas para formar especialistas en urología. Egresan cada año unos 9 urólogos. La Sociedad de Urología tiene 342 miembros.
Anestesiología
La Sociedad Dominicana de Anestesiología también se quejó de la creación de nuevas residencias.
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Los anestesiólogos y la Sociedad Dominicana Anestesiología pegaron el grito al cielo se quejó de la apertura de nuevas residencias médicas para formar especialistas.
La entidad que agrupa a los anestesiólogos dominicanos dijo que cinco nuevos programas de formación de residencias fueron abiertos, con lo que suman 27 en todo el país, lo que considera una cantidad exagerada.
“Superamos a Colombia, Venezuela, Brasil y Chile que son países con mayor población y nos superan en territorio”, comentó la presidenta de la entidad, doctora Karina Williams.
Agregó que no se han tomado en cuenta las carencias de insumos y equipos requeridos que estén al nivel para estandarizar la enseñanza de la anestesia acorde a los tiempos.
Explicó que el número de especialistas va creciendo paulatinamente y aumenta el nivel de desempleo, con un ritmo acelerado de 14 anestesiólogos por cada 100 mil habitantes, “igualando estas cifras a países desarrollados, con más extensión territorial y más población”.
Comunicado
En un comunicado titulado Residencias vs. Zonas Francas, asegura que en los últimos dos años el Ministerio de Salud ha abierto plazas para residencias médicas sin instaurar políticas de mejora en centros hospitalarios, sin entrenamiento al personal médico docente y sin crear los espacios de descanso para residentes.
Refiere que, en la pasada gestión del Departamento de Residencias Médicas del Ministerio de Salud, se había proyectado reducir la cantidad de escuelas de la especialidad e impulsar subespecialidades con la ayuda de profesores e instructores de la organización internacional de la especialidad.
“Las inquietudes de la directiva actual de la Sociedad Dominicana de Anestesiología fueron llevadas al MESCyT, representado por la viceministra Evarista Matías, y el doctor Hilario Reyes Pérez, en Residencias Médicas. La respuesta fue el silencio y se limitaron a escuchar con promesas de evaluar la situación”, precisó.
Agregó que su propuesta es retomar las pasantías de post grado de forma obligatoria en los hospitales rurales de segundo y tercer nivel que requieren un personal médico especializado.
Propuesta
Entiende que así se retorna a la comunidad el privilegio que da el Estado de realizar una especialidad médica con remuneración durante periodos de hasta 7 años.
Informó que la única subespecialidad con la que cuenta el país es anestesia pediátrica y que la mayoría de los programas académicos en América Latina cuentan con más de cinco subespecialidades en anestesia.
“Seguiremos insistiendo que las decisiones y proyecciones en el área de la salud deben ser consensuadas en conjunto no unilateralmente”, puntualizó.