Puerto Principe, HAITI.- En Fond Jeannette, Bonite, Tête Source y Terre Froide, ciudades fronterizas del barrio Bois d’Orme de Anse-à-Pitres, los productos alimenticios producidos por agricultores haitianos abastecen los mercados dominicanos en detrimento del mercado local. La flagrante falta de infraestructura para transportar los productos al mercado municipal de Anse-à-Pitres y la inseguridad de la carretera nacional número 8 que une el departamento del Sudeste con Puerto Príncipe están en la raíz de esta situación. Así, los productores se ven obligados a cruzar la frontera dominicana para rebajar el precio de sus alimentos en el mercado de Pedernales.
Dos veces por semana, varias decenas de comerciantes y productores haitianos de las localidades antes mencionadas frecuentan el paso fronterizo no oficial de Manyinn, ubicado a 40 kilómetros al norte de Pedernales, en República Dominicana.
Los domingos y jueves por la tarde, vísperas de los días de mercado en los pueblos dominicanos, acompañadas de sus maridos y/o hijos, las mujeres descargan mulas cargadas con productos agrícolas destinados al mercado de Pedernales.
Una vez allí, pasan la noche en el mercado, con la esperanza de obtener el mejor precio a la mañana siguiente por parte de los clientes dominicanos. Pero esta expectativa es incierta. Los compradores dominicanos saben que no pueden traer sus productos de regreso a Haití y que tendrán que bajar sus precios en algún momento del día.
El mercado comunal de Anse-à-Pitres, en el lado haitiano, se encuentra justo enfrente, al otro lado del río Pedernales. Podría beneficiarse de tal afluencia, sobre todo porque los clientes haitianos exigen los productos vendidos por estas mujeres. Sin embargo, las carreteras que conducen a la ciudad haitiana no permiten, en su estado actual, este transporte.