Los precios mundiales del cacao volvieron a subir sobre los 10,000 dólares la tonelada este jueves, acercándose a máximos del año, mientras se agrava la crisis de suministro de la industria chocolatera, después de que el principal productor, Costa de Marfil, interrumpió las exportaciones para junio y las ventas a plazo para la próxima temporada.
Ghana, el segundo productor mundial del ingrediente para el chocolate, dijo la víspera que pretende retrasar la entrega de hasta 350,000 toneladas métricas de granos para la próxima temporada debido a las malas cosechas.
El precio del cacao se ha más que duplicado este año y ahora cuesta más que muchos metales. Los futuros del cacao para septiembre en Nueva York alcanzaron un máximo de seis semanas, de 10,308 dólares la tonelada, y cerraron con un alza del 2.6%, a 10,110 dólares la tonelada.
Costa de Marfil y Ghana están un 30% bajo de la cosecha del año pasado. Nadie sabe cómo compensar el cacao que falta, no hay suficientes granos a corto plazo para abastecer el mercado", dijo un comerciante.
Fuentes consultadas anteriormente por Reuters indicaron que Costa de Marfil ha suspendido la compra y exportación de cacao durante el mes de junio, en un intento de mantener existencias suficientes para que los procesadores locales, que se han quedado sin granos, puedan mantener sus fábricas en funcionamiento.
Analistas advierten que las marcas de chocolate enfrentan presiones por mayores costos del cacao alrededor del mundo, aunque intentan minimizar el efecto traspasado el incremento de uno de sus principales insumos a los precios finales de sus productos terminados.
"En Estados Unidos, Hershey ha dejado muy claro que los precios de lista siguen siendo una de las flechas más importantes en su objetivo para compensar la inflación. Durante el próximo año o dos, probablemente transmitirán más inflación del cacao, y los consumidores verán precios más altos de su chocolate como resultado", dijo Ken Goldman, analista en JP Morgan.
Mientras que otras empresas como Mondelēz International, Lindt y Nestlé, podrán tomar el mismo camino. Lo anterior podría frenar la demanda de los consumidores en relación al grano, agregó el especialista. (Con información de Judith Santiago)
