La detención en Estados Unidos de dos altos dirigentes del Cártel de Sinaloa se produjo después de una traición dramática, sugieren las primeras versiones. Según ese recuento, uno de los hombres, hijo del famoso capo de la droga conocido como el Chapo, atrajo al otro con engaños a un avión que los puso a ambos en manos de las fuerzas de seguridad estadounidenses.
Uno de los agentes detenidos, Ismael Zambada García, era posiblemente el delincuente más poderoso de México, un capo septuagenario que ayudó a fundar el Cártel de Sinaloa con el Chapo hace décadas y que siguió en libertad incluso después de que su socio fuera extraditado a Estados Unidos y condenado en un juicio en Nueva York.
El otro era uno de los hijos del Chapo, Joaquín Guzmán López, quien, junto con sus hermanos, había heredado una gran parte del negocio ilícito de su padre, que transportaba grandes cantidades de cocaína y fentanilo a Estados Unidos, Europa y otros países.
Los dos hombres fueron detenidos en un pequeño aeropuerto local a las afueras de El Paso, Texas, el jueves por la tarde, después de que su avión Beechcraft King Air aterrizara allí en un vuelo procedente de México, según informaron las autoridades de EE. UU.
Guzmán López había convencido a Zambada García para que se uniera a él en el vuelo, según las autoridades, y le dijo que iban a ver propiedades inmobiliarias. El avión, sin embargo, se dirigió hacia el norte, al otro lado de la frontera.
Aunque los agentes de la ley estadounidenses habían estado tratando discretamente de persuadir a Guzmán López para que se entregara casi desde el momento en que su padre, Joaquín Guzmán Loera, fue declarado culpable en 2019, no quedó claro de inmediato por qué decidió entregarse a él mismo y a Zambada García a las autoridades de EE. UU. el jueves.
Pero los arrestos fueron aclamados por funcionarios en Washington como una gran victoria para la aplicación de la ley de EE. UU., que ha acusado a los hijos del Guzmán, conocidos como los Chapitos, por estar entre los principales contrabandistas de fentanilo del mundo.
“El fentanilo es la amenaza más mortífera a la que se ha enfrentado jamás nuestro país”, declaró el jueves el fiscal general Merrick Garland. “El Departamento de Justicia no descansará hasta que todos y cada uno de los líderes, integrantes y asociados de los cárteles responsables de envenenar a nuestras comunidades rindan cuentas”.