SAN JUAN DE LA MAGUANA: El Consorcio de Productores Agropecuarios Sostenibles, en colaboración con diversas asociaciones de campesinos de San Juan, ha llevado a cabo varias actividades con agricultores de la zona norte, solicitando al Presidente Luis Abinader la autorización de los permisos necesarios para la realización de los estudios medioambientales relacionados con el Proyecto Romero, que propone la explotación de la mina de oro en Los Romeros.
Los encuentros, celebrados en las comunidades de Juan de Herrera y El Batey, contaron con la participación de comunitarios de localidades como Jinova, El Coco, El Tamarindo, Los Ballesteros, Loma Verde, Sabana Alta, Los Bancos y Las Cañas.
Durante los eventos, se hicieron presentes dirigentes de juntas de vecinos, así como destacados miembros de la comunidad y del consorcio de productores del Valle de San Juan.
Entre los asistentes se encontraban: Antonio Fermín, presidente del consorcio y de los productores cafetaleros de Jinova; el empresario agrícola e ingeniero Wilson Terrero de Jaquimeyes; Daniel Ramos, empresario agrícola; Felipe Galva, ambientalista, caficultor y empresario agrícola de Bohechío; y Francisco Cabral, dealer de autos y empresario agrícola.
También estuvieron presentes Wilkin Mateo, Marcos Alcántara, Milton Fernández, José Cabral, dirigente de la junta de vecinos y asociaciones de productores de Juan de Herrera, y Kelvin Recio, empresario del transporte, entre otros dirigentes de las comunidades mencionadas.
A pesar de que algunos de los dirigentes inicialmente fueron renuentes a la posibilidad de que la minería se estableciera en esta zona montañosa, en recientes intervenciones compartieron experiencias sobre cómo la minería ha evolucionado en otras provincias del país, desarrollándose de manera sostenible, sin afectar negativamente el medio ambiente y coexistiendo de manera armoniosa con actividades como la agricultura, el ecoturismo y la ganadería.
Durante las discusiones, se enfatizó que, si los estudios medioambientales arrojan resultados negativos, los miembros del consorcio y las comunidades locales se opondrán a la explotación de la mina. Sin embargo, si los resultados son positivos, se comprometieron a trabajar junto al pueblo de San Juan para asegurar que la región se beneficie de lo que le corresponde y logre alcanzar su desarrollo económico y social.
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Los representantes de las comunidades y del consorcio coincidieron en la importancia de que los estudios medioambientales se realicen con transparencia y rigurosidad, para garantizar que cualquier decisión tomada sea en beneficio tanto del medio ambiente como del bienestar de los habitantes de la provincia.
