ROMA.- El secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, instó este martes a China a usar su influencia para frenar la alianza entre Rusia y Corea del Norte, dado que esa asociación obligará a reforzar la defensa tanto en Europa como Asia
«Creo que lo esencial aquí es que China tiene un importante papel que desempeñar usando su influencia sobre Corea del Norte y Rusia. Si no, los países de la región y de la península coreana, incluidos Estados Unidos, Corea del Sur y Japón, darán nuevos pasos para fortalecer sus capacidades de defensa», dijo en una rueda de prensa al término de la cumbre del G7 en Italia.
Blinken, que se despide de este foro ante el regreso a la Casa Blanca del republicano Donald Trump, explicó la «profunda preocupación» que despierta esta colaboración entre regímenes.
«No solo por lo que Corea del Norte está haciendo por Rusia en su agresión a Ucrania, sino por lo que Rusia hace y puede hacer por Corea del Norte en términos de sus capacidades de misiles o nucleares», sostuvo el jefe de la diplomacia estadounidense.
Esto, advirtió, hará que los países del entorno refuercen sus fuerzas de defensa, lo que podría soliviantar a Pekín.
«Sin duda esos pasos no van dirigidos a China pero a China no le gustarán. Como miembro del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, creo que todos miramos a China para que use su influencia e intente llevar esto a un final», aseveró Blinken.
Los ministros del G7, el grupo de democracias más industrializado del planeta (Alemania, Canadá, Estados Unidos, Francia, Italia, Japón y Reino Unido) se reunieron en las localidades italianas de Fiuggi y Anagni (centro), bajo la presidencia rotatoria italiana.
En la declaración final de la cumbre, el Grupo denunció el «creciente apoyo» de China a la industria de defensa de Rusia, lo que a su parecer permite continuar su invasión de Ucrania y amenaza con repercutir en la seguridad a «gran escala».
«En la búsqueda de relaciones constructivas y estables con China, reconocemos la importancia de un compromiso directo y sincero para expresar preocupaciones y gestionar diferencias», sostiene este grupo.
«Estamos profundamente turbados por el creciente apoyo proporcionado por China a Rusia y a su base industrial de defensa, que permite al país de continuar su guerra ilegal con Ucrania, con importantes implicaciones para la seguridad a amplia escala», resalta el G7.
En esta cumbre de dos días seprestó una gran atención a las relaciones con China y la región del indo-pacífico, y al apoyo de Pekín al régimen de Vladimir Putin.
«Pedimos a china que cese la transferencia de vehículos aéreos sin piloto de ataque y de materiales de doble uso, incluidos los componentes de armas y materiales», exigen.
Asimismo, instan a Pekín a «intensificar los esfuerzos» para promover la paz y la seguridad internacional y a «solicitar a Rusia la interrupción de sus ataques militares y retirar inmediata, completa e incondicionalmente sus propias tropas de Ucrania».
También ordenó «con la máxima firmeza» la «creciente cooperación militar» entre Rusia y Corea del Norte, sobre todo por el despliegue de tropas de Pyongyang en la guerra contra Ucrania.
«El apoyo directo proporcionado por la República Popular de Corea a la guerra de agresión rusa contra Ucrania, además de testimoniar los desesperados esfuerzos rusos por compensar las pérdidas sufridas, marca una peligrosa expansión del conflicto, con graves consecuencias para la seguridad de Europa y el Indo-Pacífico», resaltó.
Asimismo, agregó que está trabajando «junto a socios internacionales para dar una respuesta coordinada a tales desarrollos»