Santo Domingo.-Con la reforma laboral el Gobierno y el Partido Revolucionario Moderno (PRM) podrían estar infligiendo al empresariado y al sector patronal en general el primer disgusto de importancia, el que no se atrevieron con la Reforma Fiscal.
Todo parece que el PRM usará su mayoría en el Congreso para aprobar el proyecto de reforma al Código Laboral, sin tomar en cuenta que el sector patronal ha advertido que no está de acuerdo si no se produce alguna modificación a la cesantía.
Pero parece que el presidente de la República y el propio Congreso perremeista no quieren desaprovechar la oportunidad para anotarse otra reforma, aunque a media.
Esta semana la cúpula empresarial y patronal se activó en un esfuerzo de convencer al Gobierno y al Congreso de que deben incluir la cesantía en la modificación, aunque no se haya consensuado con los trabajadores, pero los senadores oficialistas han dejado saber que el compromiso está con el sector laboral.
Al menos así lo parece la postura del presidente de la comisión especial que estudia la Reforma Laboral, el senador Rafael Barón Duluc, quien después de la visa de los empresarios disgustados, garantizó al sector sindical que no tocarán la cesantía, como acordó el presidente Luis Abinader.
Les dijo que en lo que tiene que ver con el Senado, actuarán como una entidad garantista de los derechos de los empleados y no variarán la forma en que se entrega la cesantía. “La cesantía está cerrada. No deben tener ningún temor".
El presidente Luis Abinader consiguió sin mayores tropiezos la primera del paquete de reforma que desea implementar, que fue la modificación a la Constitución, a pesar de que la oposición la estuvo torpedeando.