Santo Domingo, RD – En un emotivo acto celebrado en la Embajada de España, el reconocido cantante y compositor dominicano Juan Luis Guerra fue condecorado con la Encomienda de la Real Orden de Isabel la Católica, una de las distinciones más altas otorgadas por el Gobierno español. La ceremonia contó con la presencia del presidente Luis Abinader y varios miembros del gabinete.
El embajador de España, Antonio Pérez-Hernández, tuvo el honor de imponer la condecoración a Guerra, quien estuvo acompañado por su familia. En su discurso, el artista rememoró su primera visita a España en 1989 para promocionar su famoso tema "Ojalá que llueva café", el cual se transformó en un símbolo de esperanza gracias al apoyo del público español.
Un vínculo cultural significativo
Durante su discurso de agradecimiento, Guerra expresó su aprecio por España, destacando momentos especiales como sus giras en plazas de toros y el impacto emocional que su música ha tenido en ambos países. “Gracias por las giras en las plazas de toros y por llevar la tambora en los pies y la güira en las manos”, comentó, enfatizando la conexión cultural entre República Dominicana y España.
El embajador Pérez-Hernández subrayó el impacto duradero que Guerra ha tenido en la cultura española. “Su música ha sido un puente entre nuestras culturas”, afirmó. “Cuando su música suena, todos nos volvemos un poquito dominicanos”, añadió.
Reconocimiento a su legado cultural
La condecoración busca reconocer la significativa contribución de Juan Luis Guerra a la difusión del idioma y la cultura española a nivel global. Según Pérez-Hernández, este reconocimiento es un símbolo del respeto y gratitud del pueblo español hacia Guerra, quien ha actuado como embajador cultural de la música latina.
Guerra expresó su alegría por este reconocimiento y destacó lo que España ha significado para su carrera: “Estoy feliz con este reconocimiento y todo lo que me ha dado España a cambio de un poquito de merengue”. También recordó el apoyo recibido por parte del público español y mencionó a artistas como Alejandro Sanz y Joaquín Sabina como influencias significativas.
Finalmente, dedicó esta distinción a su esposa Nora, sus hijos Paulina, Jean Gabriel y Ana; a su mánager Amarilys; a su banda 4.40; así como a familiares, amigos y fans.