Santo Domingo. – En el marco del proyecto «Hacia una estrategia de política migratoria moderna, respetuosa de los derechos humanos y defensora de la soberanía nacional», el Instituto Nacional de Migración de la República Dominicana (INMRD) organizó un desayuno de trabajo con actores clave del sector público para presentar los avances en el fortalecimiento institucional de la gestión migratoria.
El encuentro fue liderado por Wilfredo Lozano, director ejecutivo del INMRD, quien destacó que la creación de una política migratoria moderna requiere un análisis técnico riguroso y un diálogo interinstitucional. Lozano enfatizó que el proyecto no solo busca actualizar el marco normativo, sino también establecer una gobernanza migratoria más coherente con los desafíos actuales del país.
Durante la sesión, se expusieron los avances en áreas clave del proyecto: marco normativo, mercado de trabajo, gestión fronteriza, control migratorio y ordenamiento institucional. Consultores especializados presentaron diagnósticos preliminares y subrayaron la importancia de fortalecer las capacidades del Estado en estos ámbitos.
Anselmo Muñiz, director de Estudios y Análisis Estratégicos del Ministerio de Relaciones Exteriores (Mirex), destacó que esta iniciativa es esencial para dotar al país de herramientas efectivas para gestionar la movilidad humana. Subrayó que las instituciones deben poder defender técnica y jurídicamente su papel en la gestión migratoria.
Mayrellis Paredes, encargada de Trata de Personas del Mirex, resaltó la necesidad de visibilizar y coordinar las acciones contra la trata y el tráfico ilícito de migrantes. Paredes insistió en que este tipo de proyectos permite desarrollar políticas sostenibles y mejorar la cooperación interinstitucional.
En el ámbito de seguridad fronteriza, el coronel Amauris Francisco Guerrero, subdirector administrativo del Cuerpo Especializado de Seguridad Fronteriza Terrestre (Cesfront), hizo hincapié en la importancia de integrar claramente el rol de los organismos militares en la gestión de la frontera, asegurando el intercambio de información y promoviendo el diálogo entre la sociedad civil y las autoridades de seguridad.
Julián Mateo, viceministro de Trabajo, abordó la dimensión laboral de la política migratoria. Destacó que el programa 145, en proceso de revisión, ha sido bien valorado por Estados Unidos por su enfoque en la protección social de los trabajadores inmigrantes. Además, señaló que sectores como la agroindustria y los servicios dependen cada vez más de mano de obra extranjera, por lo que es crucial establecer reglas claras para una migración laboral ordenada.
El INMRD concluyó el encuentro subrayando que la construcción de políticas migratorias se basa en trabajo técnico, el intercambio de conocimientos y el reconocimiento del rol de cada institución. En los próximos meses se presentarán los informes técnicos y una propuesta de política migratoria que incorporará las recomendaciones surgidas de estos espacios de diálogo.
