Parecía que Max Scherzer se estaba asentando durante su primera apertura con los Azulejos, pero entonces las cosas dieron un giro. Un Scherzer visiblemente frustrado habló con el coach de pitcheo Pete Walker en el dugout después del tercer inning, tras sólo 45 lanzamientos en una apertura contra los Orioles donde se esperaba que llegara a 80.
Momentos después, el teléfono del bullpen estaba sonando y el día de Scherzer había terminado debido a lo que el equipo anunció más tarde como dolencia en el costado derecho.
Este es un comienzo preocupante en el paso de Scherzer por Toronto después de que un problema en el pulgar derecho resurgiera a finales de los Entrenamientos Primaverales. Su frustración era clara incluso entonces, después de haber pasado la temporada muerta trabajando en mejorar la fuerza de su agarre y la fuerza del pulgar, sólo para terminar en el mismo lugar.
La marca de los 50 lanzamientos parece ser donde el pulgar de Scherzer empieza a darle problemas.
