AUGUSTA, Georgia, EE.UU. (AP) — El Masters tiene su grupo más nutrido de participantes en 10 años. Y, sin embargo, el primer gran torneo del año parece centrarse todavía en dos golfistas.
Las expectativas han seguido a Rory McIlroy durante sus recorridos entre las magnolias en la última década. Cada viaje al Augusta National le da una oportunidad de finalmente conseguir el último trofeo del Grand Slam que le falta en su colección para unirse al grupo más selecto del golf.
El norirlandés se ha ido de 10-0 en Augusta desde que ganó su tercer certamen del Grand Slam. No ha estado particularmente cerca.
Scottie Scheffler viene de un año tan asombroso que le valió comparaciones con el mejor Tiger Woods. Ahora intenta unirse a Woods, Nick Faldo y Jack Nicklaus como los únicos ganadores consecutivos del Masters. Otra chaqueta verde sería su tercera en cuatro años, un dominio no visto en Augusta desde el ejercido por Nicklaus hace unos 60 años.
"¿Por qué mi juego se adapta tan bien al Augusta National? Es una buena pregunta”, dijo Scheffler. “La mejor manera en que podría describirlo es que cuando tengo el control de mi bola de golf, tengo una estrategia muy buena para jugar en el campo. Pero al final del día, tienes que hacer los tiros.