Los ejércitos ruso y ucraniano apenas respetaron la tregua pascual de 30 horas declarada el sábado por el Kremlin y apoyada por Kiev, ya que los cañones no dejaron de sonar en todo el campo de batalla.
Por lo tanto, a estas horas del domingo se desconoce si el presidente ruso, Vladímir Putin, aceptará la propuesta de su homólogo ucraniano, Volodímir Zelenski, de prolongar el alto el fuego por un total de 30 días.
Si no hay cambios de última hora, el alto el fuego expirará a la medianoche, hora de Moscú (21:00 GMT). La tregua energética de 30 días también venció esta semana sin que ninguna de las partes abogara por su prolongación.
Ambas partes constataron una disminución de la actividad en la mayoría de los sectores del frente, aunque el alto el fuego estuvo marcado por constantes violaciones.
El Ministerio de Defensa de Rusia acusó a Ucrania de atacar durante la noche sus posiciones en dos localidades de la región de Donetsk, epicentro de los combates desde 2022.
El informe militar ruso en Telegram también aseguró que Kiev lanzó durante la noche 48 drones de ala fija, uno de los cuales tuvo como objetivo la península de Crimea, que ha sido anexionada.
Las unidades ucranianas habrían disparado hasta en 444 ocasiones contra las posiciones del ejército ruso utilizando piezas de artillería y morteros, precisó la nota castrense, que también mencionó muertos y heridos como resultado de los ataques, sin especificar.
Al declarar la tregua, Putin aseguró que el cumplimiento de este alto el fuego demostraría «cuán sinceros» son los llamamientos a la paz de Zelenski.
