NUEVA YORK. — El ministro de Relaciones Exteriores de República Dominicana, Roberto Álvarez, alertó este lunes ante el Consejo de Seguridad de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) sobre la creciente amenaza que representa la crisis en Haití para la seguridad nacional dominicana.
Durante su intervención, Álvarez destacó que República Dominicana, al ser el único país que comparte frontera con Haití, sufre de manera directa los impactos de la escalada de violencia generada por bandas criminales en el vecino país.
“La situación de Haití se ha convertido en una grave amenaza para la seguridad nacional de la República Dominicana”, declaró el canciller.
El funcionario denunció que las bandas armadas haitianas han manifestado su intención de avanzar hacia la zona fronteriza, lo que ha obligado al gobierno dominicano a desplegar medidas inmediatas para proteger su territorio. En ese sentido, enfatizó que el país caribeño está dispuesto a defender su soberanía ante cualquier amenaza externa.
Álvarez también informó que se han reforzado los controles en puertos y puntos estratégicos del país, medidas que —dijo— implican un considerable costo económico para el Estado dominicano.
Además, alertó sobre la preocupante capacidad operativa de los grupos armados en Haití, señalando que “las bandas haitianas parecieran estar más organizadas y bien armadas que la Policía Nacional Haitiana y la fuerza multinacional keniana”.
Como parte de su exposición, el canciller relató un incidente reciente en la comunidad haitiana de Mirebalais, donde bandas criminales tomaron el control del área, incluyendo la sede del consulado dominicano. Según informó, el personal diplomático fue evacuado con antelación, evitando consecuencias humanas.
“Hace once días, estos criminales invistieron la comunidad haitiana de Mirebalais y ocuparon la sede del consulado dominicano en ese poblado. Afortunadamente, el personal que custodiaba el edificio había sido retirado previamente”, explicó.
El canciller también advirtió que los grupos criminales han amenazado con continuar su avance hacia la frontera dominicana, lo que ha puesto en máxima alerta a las autoridades de seguridad.
Finalmente, Álvarez expresó la profunda preocupación del gobierno dominicano por la limitada disponibilidad de fondos internacionales para abordar la crisis haitiana, lo que —según afirmó— obstaculiza la capacidad de respuesta y cooperación efectiva frente a la gravedad del conflicto.
“La comunidad internacional no puede seguir postergando una solución integral a la situación de Haití”, concluyó Álvarez.
