Santo Domingo. – La convocatoria del presidente Luis Abinader a los expresidentes de la República para abordar la crisis en Haití ha sido acogida con apertura tanto por el oficialismo como por la oposición, generando expectativas sobre la posibilidad de construir una postura común en materia de política exterior y seguridad fronteriza.
Desde el Partido Revolucionario Moderno (PRM), se calificó la iniciativa como un “acto de madurez política y sensatez”, resaltando que la migración irregular proveniente de Haití y sus implicaciones exceden al actual gobierno, requiriendo consensos duraderos entre las principales fuerzas del país.
Por su parte, los partidos de oposición, Fuerza del Pueblo y Partido de la Liberación Dominicana (PLD), saludaron el gesto de diálogo, aunque señalaron que el mismo debe ser genuino y traducirse en acciones concretas. Ambos partidos insistieron en que las recomendaciones surgidas del encuentro deben tener impacto real en las decisiones del Ejecutivo.
En una postura crítica pero constructiva, el presidente de la Fuerza Nacional Progresista, Pelegrín Castillo, pidió ampliar el alcance del diálogo para incluir a otros actores políticos, expertos en seguridad y representantes de la sociedad civil con experiencia en asuntos de soberanía.
Durante su encuentro semanal con la prensa, Abinader confirmó que en los próximos días enviará comunicaciones formales a los expresidentes Leonel Fernández, Danilo Medina e Hipólito Mejía, con el fin de coordinar una reunión de alto nivel que permita consensuar respuestas estratégicas ante la profunda inestabilidad que afecta al vecino país.
“La situación en Haití exige la responsabilidad de todo el liderazgo nacional. Este no es un momento para divisiones, sino para construir juntos una política de Estado”, declaró el mandatario.